La cláusula antimonopolio de Podemos sobre RTVV se mantiene pese a las reticencias del PSPV

VALENCIA. La Comisión de Radiotelevisión Valenciana en Les Corts se celebró este lunes con el debate de enmiendas preceptivo que antecede a la aprobación de la ley que está prevista para el pleno del próximo 14 de julio. Al margen de las diferentes posturas respecto a la cabida que pueden tener los extrabajadores del ente, una de las cuestiones importantes giraba, como ya informó este diario, en torno a las contrataciones externas que pudiera realizar la nueva empresa pública. 

Así, una de las enmiendas impulsadas por Podemos y que estaba respaldada por Compromís y también por el PSPV, imponía que ninguna empresa pudiera concentrar más del 20% del coste de cualquier licitación de la nueva corporación, remarcando además que ésta se haría en forma de lotes separados.

Esta parte de la negociación tuvo su enjundia. Fuentes de los grupos parlamentarios señalaron que los socialistas, cuyo síndic Manolo Mata había firmado la enmienda, reflexionaron -vía Presidencia de la Generalitat- sobre la posible retirada de la misma para, ante la negativa de Podemos y Compromís, optar posteriormente por una matización de la enmienda.

Cabe recordar que esta disposición establecía un límite para evitar que una sola empresa -o en colaboración con otras- concentrara "más del 20% del coste total licitado por la corporación, tanto en proyectos de producción propia externalizada o externa".

En este sentido, la enmienda señalaba que estas limitaciones se aplicarían también "tanto a las franjas horarias de la parrilla televisiva y radiofónica como a los diferentes géneros y formatos". Un aspecto este que, los socialistas, tras encontrarse el rechazo para la retirada de la propia enmienda que habían suscrito inicialmente, sí consiguieron retirar por la cesión de Compromís y Podemos.

Finalmente, la enmienda quedó redactada de la siguiente manera: "Para garantizar la pluralidad y la libre competencia, ninguna empresa -por sí sola o en colaboración con otros- podrá concentrar con carácter anual más del 20% del total contratado por la Corporación, tanto en proyectos de producción propia externalizada como externa". De esta manera, se eliminaba el aspecto de las franjas horarias de la parrilla pero se mantenía la esencia de la cláusula antimonopolio.

Por otro lado, otras de las enmiendas propuestas a última hora relacionadas con estos aspectos pasaron el corte sin mayores problemas. Así, la inclusión de cláusulas sociales y medioambientales de cara a la contratación recibió luz verde, de la misma manera que fue aceptada la que incluía la garantía de que los trabajadores que participen en el servicio contratado gocen "de unas condiciones laborales similares a las del personal que desarrolla estas tareas en la corporación".

Además, también quedó aprobado que quedarán "excluidos de las contrataciones los operadores económicos que hayan sido condenados con sentencia firme" o que utilicen "como forma de pago con la Generalitat una cuenta bancaria situada en un paraíso fiscal".

Firma de dos grupos parlamentarios para los miembros del Consell Rector

Una de las enmiendas destacadas que fue aprobada, en este caso presentada por Compromís, es la referida a la obligatoriedad de la firma de dos grupos parlamentarios para presentar los nombres del Consell Rector, lo que incrementa la necesidad de consenso a la hora de poner candidatos sobre la mesa.

Por otro lado, y curiosamente, una de las enmiendas -también de Compromís- que se 'tumbó' durante la jornada con los votos de PP, C's y Podemos fue la de reducir de cinco a cuatro el número de personas para el Consell Rector elegidos por parte de los grupos parlamentarios en Les Corts.