VALÈNCIA, (EP). La Fundación Pro-AVE ha constatado un "cambio de rumbo" y un "giro" en la política reciente del Gobierno central con el Corredor Mediterráneo, algo que ha relacionado con la "intensa acción movilizadora, coordinadora y reivindicativa del empresariado".
"El nuevo ministro --de Fomento, Íñigo de la Serna-- ha pasado de las promesas a los hechos, afrontando seriamente el problema de mala gestión y descoordinación que ha tenido bloqueados durante años las obras de tramos críticos", entre los que la organización ha destacado el de Castellbisbal-Vila-Seca, Vandellós-Castellón y el nudo de la Encina, así como la conexión de Alicante a Murcia y la implantación de un tercer hilo en las dos vías de València-Castellón.
En una misiva, el presidente de Pro-AVE, Federico Félix ha señalado que "cuando todo esto esté ejecutado --en 2019, según ha prometido el ministro--, tanto la Comunitat Valenciana como Murcia estarán conectadas con doble vía de ancho internacional con la frontera francesa".
Para Félix, este compromiso "parece reafirmarlo el propio presidente del Ejecutivo, Mariano Rajoy", en declaraciones con motivo de la cumbre de la semana pasada entre los presidentes de España y Francia donde se abordó el desarrollo del Corredor. "Teniendo en cuenta la apuesta del presidente de Francia, Emmanuel Macron, por un importante plan de infraestructuras en su país y en Europa, constituye un poderoso aval al proyecto, ha aseverado.
En cualquier caso, el titular de la organización ha remarcado que "la experiencia aconseja no solo no bajar la guardia, sino trabajar para reforzar el nuevo viento de cola que parece impulsar el desarrollo del Corredor".
Esto implica, en su opinión, "hacer que la comisión de coordinación del proyecto funcione", además de "mantener y ampliar la labor de movilización y coordinación de la sociedad civil del arco Mediterráneo español" y, de esta forma, "conseguir la fuerza suficiente para acelerar la construcción de la doble plataforma", el objetivo final de la plataforma empresarial.
Frente a la postura actual del Ministerio de Fomento, Félix ha aludido a la "poca atención" suscitada por el proyecto por los gobiernos centrales de España y el "manifiesto retraso" de su desarrollo.
"Un ninguneo que no solo afecta seriamente a los intereses del área económicamente más importante y de mayor proyección exportadora de España, sino también a la dignidad de los ciudadanos que en ella residen", ha manifestado, para recordar el trabajo durante seis años de la Fundación Pro-AVE y las "buenas palabras" recibidas del Gobierno de España para después recibir "un comportamiento decepcionante y dilatorio" que provoca, a su juicio, "indignación de productores, riesgo para la economía y privación de oportunidades".
Se trata de una postura que no es nueva, ya que Federico Félix ha recordado que es algo que los empresarios "sufrieron" con la ejecución de la A-3 y la implantación de la alta velocidad entre Madrid y la Comunitat Valenciana.
En este caso, aceptaron el tercer carril como "alternativa provisional" para facilitar la conexión en ancho europeo, "sin renunciar al proyecto definitivo de doble plataforma". "Ha sido el interés nacional y valenciano el criterio de nuestra propuesta y reivindicación", ha remarcado.
A nivel autonómico, ha incidido en el "estrangulamiento" al potencial de desarrollo y generación de nuevas actividades de valor añadido "por la ausencia de una buena conectividad con Europa que convierta a los puertos valencianos, estratégicamente ubicados, en nudo de comunicaciones entre Asia y el centro y norte de Europa".
El titular de Pro-AVE también ha apuntado la afección que supone para "colectivos muy vulnerables" como los agricultores y "sectores importantes" como el agroalimentario, el azulejero, el automovilístico o el de servicios logísticos.
