Sí. eVALÈNCIA. Los sindicatos han puesto 'el grito en el cielo' por la oposición de promoción interna de administrativo de la Conselleria de Sanidad, celebrada el pasado 27 de mayo. UGT, CCOO, Simap e Intersindical han manifestado sus quejas al entender la enorme dificultad con la que estaba planteada la prueba, e incluso han señalado preguntas que entienden que no eran el objeto de la materia prevista en la convocatoria.
"La dificultad de la prueba, absolutamente desproporcionada y sin ajustarse a las funciones que desempeña el grupo administrativo C1, es absolutamente ilegal", señalan desde Simap. Mientras, desde UGT, critican que el nivel exigido en las preguntas de la oposición -única vía de ascenso de los auxiliares administrativos a un puesto superior- no se corresponde con los puestos a cubrir.
Al examen al se presentaron alrededor de 3.000 personas para tan solo un centenar de puestos de administrativo, lo que les lleva a reprochar con más vehemencia el planteamiento del examen. "No hay excusas que amparen la irresponsabilidad de la Conselleria por no orientar a los tribunales de las oposiciones sobre la necesaria proporcionalidad y adecuación del contenido de las pruebas selectivas con las funciones a realizar por las diferentes categorías profesionales", señalan desde Intersindical.
Según el sindicato, la redacción de las preguntas era tan confusa que se ha desencadenado un alud de impugnaciones de forma que de un total de 60 preguntas para la modalidad A, se habrían impugnado al menos un 20%. "Es significativo el despropósito del tribunal", insisten.
"La forma de plantear el examen ha provocar más malestar cuando el personal de la función administrativa ya esta molesto", aseguran desde UGT. Y es que todos los sindicatos señalan que los auxiliares administrativos realizan en la administración tareas que deberían desempeñarlas puestos superiores al suyo.
"Más del 80% de estos puestos de trabajo están realizando funciones para las que no son retribuidos", aseguran desde CCOO. "Estamos pidiendo que les suban al nivel de lo que están haciendo". Por este motivo, consideran una provocación la manera de plantear la prueba. Mientras, desde la Conselleria de Sanidad señalan que se están estudiando las quejas.
Para tratar este tema, desde UGT han solicitado la convocatoria de una Mesa Técnica para el Personal de la Función Administrativa que trate la cuestión de estos profesionales. "Esta situación supone que la Conselleria lleva años lucrándose de los auxiliares administrativos y ahora su forma de manifestar justicia y gratitud es realizando un examen imposible que penaliza e impide la promoción interna", insisten desde Simap.
