VALÈNCIA. El nuevo smart electric drive se sube al tren de la movilidad eléctrica más atractivo que nunca. Y es que se conjuga la agilidad del smart con una conducción libre de emisiones locales: la combinación ideal para circular por Valencia. Con un par motor de 160 Nm, disponible desde el primer segundo, resulta especialmente ágil al acelerar con sus 60 kW (81 CV) de potencia. "El smart es el coche urbano por excelencia y perfecto con propulsión eléctrica", asegura Roland Schell, presidente de Mercedes-Benz España "por eso ofreceremos nuestra gama completa con propulsión totalmente eléctrica: smart fortwo, smart forfour e incluso smart cabrio". La prueba de un vehículo y las sensaciones que se perciben al volante no solo son el argumento definitivo para confirmar las expectativas que se esperan de él sino que también permite descubrir lo que un detallado catálogo no es capaz de transmitir.
La caravana smart electric drive 2018, que llegará entre los días 5 y 7 a Valencia ofrece la posibilidad de sentarse a los mandos del vehículo urbano por excelencia. Y la primera reacción del conductor al dar al contacto de encendido es una enorme sonrisa de sorpresa al constatar la ausencia de cualquier ruido procedente del motor. Sentir como se desplaza por cualquier callejuela de la ciudad y poder disfrutar del dinamismo en cada curva hacen de ésta una experiencia única.
Durante los tres días que la caravana estará en la concesión Mercedes-Benz Valencia en sus instalaciones de Massanassa en Pista de Silla, los interesados podrán descubrir cómo define smart la movilidad eléctrica con las seis unidades (dos fortwo coupé, dos fortwo cabrio, dos forfour) que componen esta caravana.
Para concertar una de las 30 pruebas diarias posibles, el interesado deberá llamar al 91 626 06 00 y hacer su reserva indicando:
Nombre del concesionario: Mercedes-Benz Valencia
Persona de contacto
Teléfono y dirección de correo
Durante los 30 minutos que durarán las pruebas, los interesados podrán comprobar de primera mano las bondades de estos modelos en la conducción urbana. Sus prestaciones son las de siempre: se mueve ágilmente y como un relámpago gracias, entre otros, a un diámetro de giro especialmente pequeño (fortwo: 6,95 metros; forfour: 8,65 metros).
Un factor importante para los clientes de coches eléctricos es el tiempo de recarga. En este sentido, el nuevo smart electric drive es mucho más confortable: todos los modelos incorporan de serie un nuevo y potente cargador de a bordo. En EE. UU. y Gran Bretaña el tiempo de recarga es de 2,5 horas (de 0 al 80%), lo que significa que se ha reducido a la mitad si lo comparamos con el modelo anterior. En España este proceso se realiza en 3,5 horas. Mediante la aplicación 'smart control', la carga se puede supervisar cómodamente a distancia y pueden controlarse muchas otras funciones tales como la recarga inteligente.
A partir de la primavera de 2018 se ofrecerá opcionalmente un cargador rápido especialmente potente de 22 kW. Éste permitirá la recarga del smart electric drive en mucho menos tiempo: en menos de 45 minutos (0-80%), siempre que en función de las condiciones locales sea posible la recarga con corriente trifásica.
Desde la parte trasera del smart electric drive un motor eléctrico de 60 kW (82 CV) de potencia trasmite su fuerza de forma constante a las ruedas. Desde parado ofrece al instante un potente par de 160 Nm. La autonomía máxima es de 155 km, ideal para moverse por ciudad sin producir emisiones locales. La velocidad máxima (130 km/h) está limitada electrónicamente para no disminuir la autonomía.
Debido a la característica de potencia del motor eléctrico, el smart funciona con una única desmultiplicación del cambio. Por lo tanto ya no es necesario cambiar de marchas, una gran ventaja cuando hay mucho tráfico en la ciudad. Para circular marcha atrás, el motor invierte el sentido de giro.
Resumen de los datos del nuevo smart electric drive:
Además del modo de conducción básico, el conductor puede seleccionar el modo ECO. Este modo ha sido concebido para un estilo de conducción muy eficiente. Para conseguirlo, se ha limitado la velocidad máxima, se ha adaptado la curva característica del pedal acelerador y se ha preseleccionado el nivel máximo de recuperación energética. Durante la marcha por inercia o en modo de frenado, la energía cinética del vehículo se transforma en energía eléctrica, proceso denominado «recuperación». La recuperación, basada en un sistema de radar y activa en el modo de conducción básico, funciona de manera predictiva. Mediante un sensor de radar, se observa el tráfico y se selecciona el nivel de recuperación en función de la situación actual.