Hace 20 años que Fernando comenzó a correr, cuando la ropa no era técnica y los maratones se cruzaban con el tráfico de las ciudades.
Tras jugar al fútbol, su cuerpo le seguía pidiendo deporte y ya no lo ha abandonado desde entonces. Asegura no haber llegado con molestias a este momento tras dos décadas de actividad runner, entre otras cosas porque nunca se ha obsesionado con las marcas.
Busca siempre un hueco, incluso cuando se encuentra en medio de la organización de la Costa Blanca Cup, para comer rápido y correr unos kilómetros. Aunque sea en Benidorm, en pleno verano.