Ramiro Navarro Abogados consigue exonerar una deuda millonaria a unos empresarios de Castellón

CASTELLÓ. Desde que la pandemia desató la recesión económica en el año 2020, el despacho de Ramiro Navarro Abogados ha promovido numerosas solicitudes de concursos de acreedores de clientes con un perfil definido. Se trata habitualmente de empresarios que han heredado las deudas de su actividad empresarial, bien con motivo de su condición de avalistas de las deudas que titula la empresa, bien por haber sacrificado su patrimonio personal con la esperanza de reavivar las cuentas de su negocio.

La experiencia del reconocido bufete como profesionales del Derecho en el ámbito mercantil demuestra que el fracaso empresarial no es un obstáculo para iniciar otra actividad económica. Prueba de ello son los testimonios de sus clientes que, tras conseguir la exoneración de todas sus deudas, han constituido una nueva sociedad o financiado la compra de su vivienda.

La Ley de la Segunda Oportunidad es un mecanismo efectivo para borrar el estigma que caracteriza al deudor incluido en ficheros de solvencia e inmerso en numerosas ejecuciones judiciales, un desenlace predecible cuando el deudor concursado reúne los requisitos que la ley exige para conceder la exoneración de las deudas.

De hecho, un caso concreto, en el que Ramiro Navarro Abogados ha logrado recuperar una deuda millonaria de unos empresarios de la provincia de Castellón, marca un precedente en la trayectoria profesional del despacho, no solo por la labor para acreditar la situación de sobreendeudamiento de los clientes y definir el pasivo generado durante años, sino también por la asistencia profesional del bufete tras la conclusión del procedimiento concursal que tenía como objetivo redefinir el proyecto empresarial.

El importe de la deuda exonerada, cuyo pago hubiera sido inasumible por los empresarios de no haberse acogido a la Ley de la Segunda Oportunidad, es igualmente reseñable. No en vano, el montante de la deuda se habría incrementado exponencialmente como consecuencia del devengo de intereses y costas al haber reclamado la gran mayoría de los acreedores el pago de la deuda por vía judicial.

Los empresarios afectados tenían un pasivo heterogéneo, ya que algunas de las deudas las habían contraído a título personal, mientras que otras tenían su origen en la insolvencia empresarial por la frustración del negocio familiar, algo que no ha supuesto ningún obstáculo para conseguir la exoneración.

Este nuevo caso de éxito de Ramiro Navarro Abogados ha logrado dignificar la situación personal y económica de los clientes del despacho, que por motivos ajenos a la gestión económica de su empresa comprometieron su patrimonio y que finalmente han podido aprovechar la nueva coyuntura legislativa tras la reforma del texto refundido de la Ley Concursal que brinda un procedimiento rápido y eficaz.