VALENCIA. La fábrica de trenes y locomotoras de Albuixech Stadler Rail Valencia, propiedad del grupo suizo Stadler Rail AG desde enero de 2016, ha cerrado su primer ejercicio sin lograr nuevos contratos. Así, la factoría deberá afrontar 2017 tan sólo con los pedidos heredados de la era Vossloh, que dejó una importante cartera comandas al nuevo propietario de la industria.
El el haber de la filial dirigida por Íñigo Parra tan sólo cabe anotar este año la prolongación de dos acuerdos de la etapa anterior: uno de ellos con el operador ferroviario alemán Albtal-Verkehrs-Gesellschaft (AVG) para la fabricación de 25 tranvías ligeros Citylink NET 2012 -tal y como se contemplaba en el acuerdo inicial de 2011-, y otro de tres locomotoras Euro 4000 con el francés VFLI -pedido que proviene del contrato firmado en diciembre de 2014-.
Por contra, 2016 ha sido el año de la parálisis para el principal contrato de la mercantil, el firmado por Vossloh España para el suministro de 70 locomotoras a Sudáfrica por 250 millones de euros, un pedido que se encuentra en manos de la justicia del país.
Como viene informando este diario, Prasa, la 'Renfe sudafricana', pretende dejar sin efecto el acuerdo firmado con la intermediaria Swifambo. Y no sólo eso: también quiere devolver las 13 locomotoras recibidas hasta la fecha y recuperar lo ya abonado por unas unidades que, según aseguran, son demasiado grandes para la red ferroviaria del lugar.
Tal es la incertidumbre que la factoría valenciana ha decidido suspender la fabricación de locomotoras para la nación. El pedido de Swifambo ya cuenta con dos denuncias en contra presentadas por Prasa, que acusa de corrupción a la anterior cúpula de la empresa pública sudafricana.
La República de Bangladés podría convertirse en la solución a este quebradero de cabeza de Stadler Rail Valencia, dado que la nación asiática requiere precisamente 70 locomotoras para su red de su ferrocarril. La filial valenciana concurrirá a esta licitación pública, pero de momento se trata sólo de un posible contrato en el horizonte.
Sí es una ya realidad, por contra, el encargo de la matriz suiza a Stadler Valencia de la fabricación de bogies para el grupo, pero por el momento se trata de una actividad de soldadura poco intensiva en mano de obra.
Parra, en la rueda de prensa conjunta que ofreció junto al presidente del grupo, Peter Spuhler, aseguró que Stadler Valencia contaba con una cartera de pedidos que garantizaba el trabajo para los próximos dos años, de modo que el presente 2017 estaría cubierto. Está por ver si la compañía logra acelerar la marcha también este año para garantizar su continuidad en 2018.