VALENCIA. 11 de enero de 2016. Rueda de prensa de balance de curso en el IVAM. En la mesa, el director del museo, José Miguel G. Cortés, y el secretario autonómico de Cultura, Albert Girona. Día para hacer examen de 2015 pero, con el primer curso íntegro por delante para el nuevo equipo de gobierno, también de promesas y buenas intenciones. Durante su intervención, Girona abría de nuevo el melón anunciando que la conselleria de Cultura tendría acabado el proyecto para llevar a cabo la apertura del IVAM al barrio del Carmen con el jardín de esculturas “por primavera”, un proyecto del que, entonces, decían que estaba “muy avanzado” y que parecía acabar con la incertidumbre en torno al futuro del solar trasero de la pinacoteca.
Nueve meses después, la criatura se resiste a nacer. El proyecto está siendo llevado a cabo por la conselleria de Educación, Investigación, Cultura y Deporte; el propio museo y el Ayuntamiento de Valencia, sin embargo, los problemas a los que se está enfrentando el gobierno autonómico para llevar a cabo la expropiación y gestionar la situación con los nuevos propietarios han puesto el freno en un sueño que pulula desde hace mucho tiempo sobre el centro de arte moderno. Así las cosas, y a pesar de lo anunciado en numerosas ocasiones, el calendario sigue quemando páginas y el convenio para poner en marcha el proyecto está a la espera de tres firmas.
Las dos velocidades, sin embargo, se acentúan conforme pasan los meses y el espacio sigue teniendo poco de jardín y mucho de solar. Así las cosas, el Ayuntamiento de Valencia ya ha finalizado la redacción del proyecto, un texto que, a la espera de luz verde por parte del gobierno autonómico, está en un cajón del consistorio. En resumidas cuentas, una vez aceptado por las tres partes implicadas, el Ayuntamiento se compromete al mantenimiento; el IVAM a dotar de contenido el espacio y la Generalitat a ejecutar las obras. Por su parte, el departamento de proyectos urbanos, dependiente de la concejalía de Urbanismo, liderada por el socialista Vicent Sarrià, ya ha redactado un proyecto cuya ejecución no será tan pronta como se anunció.
Hace pocos días que desde el Ayuntamiento de Valencia se telefoneó a la conselleria de Cultura para conocer el 'estado de la cuestión' con respecto al jardín de las esculturas pues, según cuentan fuentes municipales, la intención del gobierno local es que se desatasque lo antes posible pues, desde su área, está todo hecho. "Tenemos voluntad de que sea pronto, no nos olvidamos", explican. Fue en junio de 2015 cuando, tras reunirse con diferentes asociaciones y colectivos del barrio, la dirección del IVAM anunció su intención de dotar de un uso museístico a este espacio, para lo que se abriría la calle que separa su edificio del de la Beneficència para unir el barrio del Carmen con la ronda interior.
Un museo al aire libre de 2.800 metros
Sobre el terreno de 2.800 metros cuadrados, situado en la parte trasera del museo, se quiere instalar una decena de esculturas de la colección del IVAM de artistas como Markus Lüpertz, Tony Smith, Pablo Palazuelo, o los valencianos Miquel Navarro, Andreu Alfaro, o Vicente Ortí, entre otros. "No puede estar más tiempo en las condiciones en las que se encuentra", denunciaban entonces desde la pinacoteca. La intención es que pueda servir además como un área del museo al aire libre en la que poder realizar actividades didácticas para niños sobre arte moderno y contemporáneo. En palabras del director del IVAM, “un lugar en el que la vida se relacione con el arte”.
Buscando el mayor consenso posible entre los agentes sociales, el IVAM convocó antes de anunciar el proyecto a representantes de la asociación Amics del Carme, Desayuno con Viandantes, Solar Corona, Intramurs, AJAVA, EASD, UV, UPV, Col·lectiu Mares i Pares de Ciutat Vella, AMPA de los colegios Cervantes y Santa Teresa, IES Barri del Carme, Falla Mossen Sorell-Corona, Falla Ripalda-Beneficencia-San Ramón y Associació d’Estudis Fallers. Este encuentra no era el punto de partido sino, más bien, la consecuencia de un movimiento que se cocinaba a fuego lento. En febrero de ese año se organizó conjuntamente con el colectivo Desayuno con Viandantes un acto de apertura simbólica del solar que contó con la asistencia de más de 600 personas.