VALÈNCIA. Fake news fue la palabra del año 2017 elegida tanto por el Oxford Dictionary como por la editorial Collins, en reconocimiento de un concepto que se popularizó a partir de la campaña electoral de Estados Unidos que concluyó con la victoria de Donald Trump. Se puede definir como información falsa con apariencia de noticia cierta, elaborada y lanzada por redes sociales y/o medios de comunicación con la intención de influir en la opinión pública. A veces está tan bien elaborada, que ni los medios de comunicación son capaces de detectar la trampa. En no pocas ocasiones, son los gobiernos o los partidos políticos los que las utilizan.
Es lo que ocurrió este lunes con la fake news lanzada por Alberto Núñez Feijóo en un desayuno de Europa Press celebrado en Madrid. El presidente gallego, que lidera un grupo de Comunidades Autónomas bien financiadas cuya concepción de cuál debe ser el nuevo modelo de financiación autonómica está en las antípodas del valenciano Ximo Puig –quien trata de liderar al grupo opuesto–, se lanzó a desacreditar la postura del Gobierno valenciano con la siguiente afirmación: "A Valencia se le ayudó, y mucho; nada más y nada menos que se le condonaron 11.000 millones de euros de intereses".
Es falso, pero la declaración en Madrid del que suena como candidato a tomar el relevo de Mariano Rajoy fue recogida por Europa Press y publicada por prácticamente todos los medios de comunicación. Desde el Consell le respondió el propio Puig, quien recordó que con la financiación per cápita que tiene Galicia la Comunitat dispondría de 2.500 millones de euros más al año, y desde el PSPV desmintieron rápidamente al político gallego. Pero la mentira desde Madrid resonó en toda España y la respuesta apenas tuvo repercusión en la capital.
La frase de Feijóo venía precedida de una verdad a medias –mentira a medias, por tanto–, de sobra conocida porque está en el argumentario del PP: "Yo le recuerdo [a Puig] que el modelo de financiación que en este momento está vigente en España es la financiación que pactó el partido que gobierna en Valencia, el Partido Socialista, con el tripartito catalán de la época". Es cierto, tan cierto como que este modelo de 2009, siendo pésimo, es mejor para los valencianos que el aprobado en 2002 por el Gobierno de José María Aznar, que estuvo vigente hasta 2008.
La reflexión completa de Feijóo sobre la condonación de intereses fue la siguiente: "Yo no estoy en contra de que se ayude a las CCAA para llegar a fin de mes, pero desde luego a Valencia se le ayudó, y mucho, nada más y nada menos que se le condonaron 11.000 millones de euros de intereses. A Galicia y otras CCAA no se le condonó nada. En consecuencia creo que el Gobierno de la Generalitat debería agradecerle a este gobierno actual, primero porque no es responsable de la financiación que está en vigor en España, porque es del Gobierno socialista el acuerdo, y en segundo lugar porque este Gobierno sí entró al rescate de algunas CCAA y les ayudó de una forma evidente condonándoles los intereses de la deuda entre el año 2014 y el año 2020".
El Gobierno de Mariano Rajoy decidió a finales de 2014, durante la precampaña de las elecciones municipales y autonómicas de mayo de 2015, reducir al 0% el tipo de interés que cobraría el Estado a las CCAA acogidas al Fondo de Liquidez Autonómica (FLA). Desde 2016 cobra el 0,834%. Desde que puso en marcha los mecanismos de liquidez para las CCAA en dificultades ha aplicado distintos tipos de interés que han supuesto un ahorro respecto al que habrían tenido que pagar las CCAA de haber acudido a los mercados.
Pero esto no quiere decir que el Estado haya condonado intereses. Lo hizo en aquellos casos en que cobró a las CCAA un tipo de interés inferior al que paga en los mercados y no lo hizo cuando cobró a las CCAA un diferencial, dándose la circunstancia en este último caso de haber hecho caja con los préstamos que daba para cubrir la infrafinanciación.
Un informe del Ministerio de Hacienda publicado en 2017 cifraba en 11.300 millones los intereses que se había ahorrado la Comunitat Valenciana entre 2012 y 2016 gracias a los mecanismos de financiación, y en casi 1.300 millones los intereses que había pagado al Estado. Ese es, probablemente, el origen del error de bulto de Feijóo, que confunde ahorro con condonación de intereses.
En cualquier caso, la cifra del Ministerio –11.300 millones en cinco años–, no pasa la prueba del algodón porque la Generalitat valenciana nunca tuvo en sus presupuestos consolidados un capítulo III (gastos financieros) superior a los 1.300 millones, cuando los tipos de interés eran mayores que los actuales, y no todos corresponden a deuda con el Estado. Difícilmente podía ahorrar más de lo que preveía gastar.
De hecho, el informe del departamento que dirige Cristóbal Montoro fue rebatido poco después por el principal asesor del Ministerio de Hacienda en materia de financiación autonómica, Ángel de la Fuente, que en otro informe publicado por Fedea rebajaba la cantidad ahorrada por la Comunitat Valenciana gracias a los mecanismos de liquidez del Estado a 3.915 millones. Esta sería la cantidad que podría calificarse de condonación de intereses.
No obstante, ni el Ministerio ni De la Fuente –ni, obviamente, Núñez Feijóo– tienen en cuenta que buena parte de la deuda acumulada por la Comunitat Valenciana tiene su origen en la insuficiente financiación que recibe, por lo que estamos hablando de una reducción de intereses de una deuda que no existiría, o no habría crecido tanto, si se hubiese reformado el modelo de financiación autonómica.
Ver declaración de Núñez Feijóo a partir del minuto 6.32:
Fuente: Europa Press