VALENCIA. (FOTOS EVA MÁÑEZ) El gerente nacional de logística de Ford, Luis Rafecas, deslizó este miércoles que la firma aguarda la llegada del Corredor Mediterráneo para retomar la exportación por ferrocarril de los coches que fabrica en Almussafes. Lo hizo en el encuentro empresarial e institucional sobre el Corredor Mediterráneo organizado por Valencia Plaza con la colaboración de Broseta, el ForoPPP y Everis.
El dirigente participó en la cuarta mesa redonda de la jornada, denominada ‘La visión de los agentes I: El sector empresarial’, en la que también participaron el presidente de Fecoval, José Luis Santa Isabel; el presidente de Rover Alcisa, Alfredo Rodríguez; el consejero delegado de Torrescamara, Pedro Catalán; y el gerente de la Cámara de Contratistas, Manuel Miñes.
Rafecas, que recordó que la factoría valenciana de Ford fabrica 400.000 coches al año -alrededor de 2.000 al día-, explicó que la planta de Almussafes cuenta con la mayor terminal de ferrocarril privada de España, que recibe tres trenes al día de componentes provenientes de toda Europa. La firma, sin embargo, pese a que el tren es el transporte de menor coste, según reconoce, escoge la carretera para transportar por tierra sus vehículos por tener "mayor fiabilidad y flexibilidad y mejor frecuencia".
"Contra lo que sucede en la actualidad, el Corredor Mediterráneo aporta estas tres efes. Entraría mucha más tracción de Europa, y por lo tanto una mayor frecuencia. La mayor capacidad supondría una mayor flexibilidad ante cualquier problema y contaría con una mayor fiabilidad", dijo.
Santa Isabel, en esta línea, lamentó que el Gobierno central no se haya volcado en exclusiva por esta infraestructura. "No sé las razones -y si las hay no quiero saberlas- por las que se ha decidido impulsar el Corredor Central a la par que el Corredor Mediterráneo, un hecho que ha restado inversión al Corredor Mediterráneo", lamentó.
Al respecto, Miñes añadió su crítica hacia el desarrollo de la alta velocidad para pasajeros en determinadas ubicaciones con escasos usuarios. "Centrémonos en el transporte de mercancías, que es lo fundamental", reclamó.
Las constructoras, por su parte, defendieron la obra pública como efecto tractor de la inversión. "Las infraestructuras llegan primero, y a continuación la inversión de las empresas", aseguró Rodríguez, que añadió una autocrítica sobre el exceso de construcción antes de la crisis. "Probablemente cometimos un error echando demasiado leña al fuego en tiempos de bonanza, igual que ahora lo estamos cometiendo no haciéndolo para salir adelante", añadió. Catalán, al respecto, afirmó que la obra pública "no fue la causante de la crisis". "Hay que volver sobre las infraestructuras. Tienen un efecto de arrastre", agregó.
Las jornadas fueron clausuradas por la consellera de Vivienda, Obras Públicas, y Vertebración del Territotio, María José Salvador, que cargó contra la decisión de construir un tercer carril en lugar de ejecutar el proyecto previsto. "El tercer hilo no mejorará la competitividad de nuestras empresas, será sólo temporal. No vamos a poder competir en condiciones de igualdad con otras naciones de Europa", aseveró.