VALENCIA. (FOTOS KIKE TABERNER). Un nuevo desprendimiento en la sede central de la Agencia Tributaria en Valencia, ubicada en la calle Guillem de Castro, ha obligado al completo desalojo de la misma. En esta ocasión el desplome, que habría tenido lugar la pasada madrugada, se ha producido en el mostrador de censos de la planta baja del inmueble, una zona de atención al público. Desde primera hora de la mañana se está desviando a los asistentes a la sede de la calle Músico Ginés 16 -la sede de Blasco Ibáñez- mientras se trabaja en el desescombro del deteriorado edificio.
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El inmueble, como avanzó Valencia Plaza, ya sufrió un fuerte derrumbe el pasado mes de marzo que forzó al Ministerio de Hacienda a iniciar su rehabilitación. Para ello alquiló de urgencia otro edificio en la calle Pascual i Genís, donde este mes de julio se han trasladado más de 50 empleados. (VER GALERÍA DE IMÁGENES DEL ANTERIOR DERRUMBE)
En aquella ocasión el incidente tuvo lugar en la cuarta planta del inmueble. Por suerte ocurrió de madrugada y el desplome de la gruesa placa de escayola no tuvo consecuencias. Sin embargo, sí pudo haberlas tenido, puesto que el techo cedió justo sobre el escritorio de una empleada -todo según consta en la información proporcionada por escrito a la plantilla por parte de los representantes de los trabajadores, documentación a la que tuvo acceso este diario-.
Ante el riesgo de nuevos desplomes como el que ahora se ha producido se desalojaron de inmediato las plantas cuarta y quinta del edificio y se instalaron las redes de protección en la práctica totalidad del inmueble, unos trabajos que concluyeron el pasado mes de mayo. Estas medidas tuvieron lugar tras personarse una inspección de trabajo en la sede, que fue la que constató el riesgo para los empleados y visitantes. Bastaba con levantar la mirada para apreciar la aparatosa actuación realizada.
Al parecer, el derrumbe se produjo por "el deterioro de las bovedillas del techo y de las tiras de estopa y escayola que sujetan el falso techo", un problema que podría ser extensible a la totalidad del inmueble y que exige una reforma del mismo que podría durar "varios años".
Por este motivo los representantes de los empleados solicitan que la totalidad del personal que trabaja en Guillem de Castro -alrededor de 250 personas- sean trasladadas cuanto antes a otro lugar.
En respuesta a esta petición, el delegado especial de la Agencia Tributaria en Valencia ha solicitado un estudio completo del estado del edificio, si bien ha declinado -al menos hasta lo ocurrido este jueves- la solicitud del desalojo. El argumento que esgrimía es que el edificio era seguro con las redes instaladas. El mencionado informe está previsto para el mes de septiembre, fecha en la que se volverá a replantear la situación.
La intención es que el macro complejo tributario -en el que trabajarían cerca de 900 empleados- aglutine la práctica totalidad de los servicios de la AEAT en la capital, un movimiento similar al realizado con la Ciudad de la Justicia
