La Fundación Fisabio se salta la normativa de concesión de ayudas y contratación 

VALENCIA. La contratación irregular de la hija de Dolores Salas, secretaría autonómica de Sanidad que dejó el cargo por este motivo, no fue una excepción en la gestión de la Fundación para el Fomento de la Investigación Sanitaria y Biomédica de la Comunitat Valenciana (Fisabio). El organismo de titularidad pública incumple de forma reiterada las normas en contratación de personal, en contratación de empresas y en concesión de subvenciones, según el informe de cumplimiento de la Intervención General hecho público este lunes dentro de la Cuenta General 2015 de la Generalitat.

Según este informe, la situación más grave se da en la concesión de ayudas, donde el interventor señala que dicha gestión "no se puede concluir como razonable por las deficiencias e incumplimientos". 

Uno de los más graves es que "la Fundación ha gestionado la adquisición de material a través de la instrumentalización de un procedimiento de concesión de ayudas a la investigación", lo que "ha supuesto la omisión de trámites considerados esenciales en la ejecución del gasto realizado de acuerdo con el marco legal de aplicación".

Entre las otras deficiencias, destaca la Intervención que en la convocatoria no se refleja de forma clara el baremo a aplicar en los criterios de evaluación y valoración previstos. Además, Fisabio reconoce que no dispone de una valoración previa de las solicitudes presentadas emitida por el Comité Científico correspondiente, tal y como se establece en la Convocatoria. En su lugar la relación definitiva la emite directamente el director gerente de Fisabio "y ésta no se encuentra debidamente motivada", según la intervención. "Asimismo, no se encuentra debidamente motivado el importe de la ayuda finalmente concedida o de sus motivos de concesión o denegación", añade el interventor de la Generalitat.

En cuanto a la contratación de bienes o servicios, la Intervención detecta también numerosas irregularidades y carencias en los procedimientos, aunque sin la gravedad que reviste la forma de repartir las subvenciones. Entre ellas, la de contratos menores. "Se aduce a la contratación directa, con o sin expediente de contrato menor, para satisfacer necesidades recurrentes de la Fundación (servicios de asesoría) y respecto de los cuales tampoco se recaban las autorizaciones y los informes previos y preceptivos legalmente previstos", afirma.

La Intervención también cuestiona el gasto de más de 9.000 euros en la celebración del décimo aniversario de la fundación oftalmológica FOM (Fisabio-Oftalmológica Médica), celebrado en marzo de 2015. Señala que para la mayoría de las facturas en viajes y dietas "no hemos obtenido evidencia de la debida autorización previa y no queda suficientemente justificada su adecuada necesidad", y señala los 7.091 euros de una "factura de viajes en concepto del X Aniversario: un viaje en clase preferente" o los 1.085 euros por "factura estancias hotel en concepto del X Aniversario (algunas en habitación superior)", además de menús concertados de 40 euros. 

El gerente cobró 15.000 euros de más por su despido

El informe de la Intervención destaca numerosos errores y omisiones en la contratación de personal, aunque su consideración final es que no son tan graves como los de la concesión de subvenciones.

Destaca el caso de la indemnización al director gerente Eloy Jiménez Cantos, despedido tras entrar en la Generalitat el nuevo Consell de Ximo Puig, con Carmen Montón como consellera de Sanidad.

Jiménez deberá devolver 15.000 euros al haber recibido dos indemnizaciones que no le correspondían. La primera, de 3.023 euros, no le correspondía por ser funcionario de la Generalitat. La segunda, por 13.833 euros, no le tocaba porque la cláusula de su contrato que obligaba a comunicarle el cese con tres meses de antelación era ilegal. Dado que el cese se le comunicó con sólo tres días de antelación, en lugar de los 15 que fija la ley, le corresponde una indemnización de 1.920 euros por los 12 días de preaviso, por lo que Eloy Jiménez deberá devolver a Fisabio casi 15.000 euros.

Según consta en las cuentas anuales hechas públicas por la Fundación Fisabio dentro de la Cuenta General, la entidad registró el año pasado unas pérdidas de 1,22 millones, un 118% más que en 2014, cuando obtuvo unos números rojos de 0,56 millones.