VALENCIA. La Sindicatura de Comptes ya advirtió en 2012 del descontrol en el 'bolsín' de los departamentos sanitarios. Así lo recoge en el Informe de Fiscalización de los Gastos de Personal de la Administración de la Generalitat y en su revisión en 2014. La institución fiscalizadora hacía referencia a la necesidad de realizar controles adicionales a los existentes para que los contratos de sustituciones de duración superior a 30 días se gestionen por el procedimiento general de bolsa de trabajo de la Conselleria de Sanidad.
En algunos informes de 2012 ya se apuntaba a que más del 50% de las contrataciones se realizaron a través de la Disposición Adicional Primera, el llamado bolsín, que está pensado para periodos de contratación de personal temporal, como máximo un mes y que no les toca turno por la bolsa. Lo habitual es recurrir a una lista de personas que no necesitan un tiempo de adaptación dado el poco tiempo que van a estar en esa plaza .
Sin embargo, lo que debería ser la excepción se convirtió en la regla hasta que el 31 de julio del pasado año la Conselleria de Sanidad instó a que todos los departamentos usaran la bolsa de forma correcta, es decir, para todas las necesidades de personal que fueran superiores al mes. Por este motivo, la Sindicatura también recomendaba elaborar procedimientos detallados para la cobertura urgente de puestos de trabajo en el departamento de salud.
Aludía a la Comisión de Seguimiento prevista en la disposición adicional 1ª de la Orden, de 5 de octubre de 2009, reguladora del procedimiento para la cobertura temporal de plazas del personal sanitario que, asegurando la agilidad del procedimiento, contemplen la aplicación de igualdad, mérito y capacidad. Es decir, que se regule de alguna manera el bolsín para que no sea algo arbitrario.
Las irregularidades en este ámbito se pusieron encima de la mesa a raíz de hacerse pública una grabación en la que una jefa de sección del Hospital Clínico coacciona a una trabajadora de la bolsa para que no aceptara su plaza y se destapó que era una práctica habitual.
La Sindicatura de Comptes también apuntó al no cumplimiento de la fiscalización previa en el procedimiento para la creación, modificación y amortización de puestos de trabajo de Justicia de acuerdo con la ley. A esto sumó la recomendación de implementar procesos de control en la aplicación informática.
Lo mismo pide en Educación, en la pide incluir una fiscalización previa en el procedimiento para la tramitación de los expedientes de creación, modificación o amortización de puestos docentes en la Conselleria.
La Conselleria de Sanidad tiene que lidiar con el borrador del nuevo decreto de Selección y Provisión de plazas de personal estatutario al servicio de instituciones sanitarias públicas de la Conselleria de Sanidad que tendrá que regular junto a una orden que aterrice la nueva normativa a salir.
Concretamente, son dos artículos donde los sindicatos tienen puesto el foco por poder convertirse en conflictivos. Uno de ellos es el 25, y en el que se hace referencia al baremo. En este caso, la novedad es que la regulación de las listas de empleo establecerá que la necesidad de una experiencia mínima acreditada, algo que para los residentes a priori es fácil de demostrar. Sin embargo, parece que será el 26 el que más dolores de cabeza traerá, ya que deja un margen de maniobra para cubrir las plazas que se sale del esquema de aceptar al que llega de la bolsa.
"Para la cobertura de plazas de licenciados y diplomados sanitarios de formación especializada en Ciencias de la Salud que requieran unos conocimientos técnicos previos o una experiencia concreta, se podrá establecer un procedimiento de selección distinto al previsto con carácter general, previa autorización de cobertura por la Comisión Central de Seguimiento y a través de un procedimiento que garantizará los principios de igualdad, mérito, capacidad y publicidad", recoge.
Este artículo, que deja tomar decisiones al margen de la bolsa, tendrá que ser regulado hilando final ya que el miedo de algunos profesionales y sindicatos es que este método de pábulo a la elección a dedo por los altos cargos. Por ello, apuntan a la necesidad de determinar unos plazos que no permitan crear plazas ad hoc. No obstante, fuentes hospitalarias aseguran que desde que llegó el actual Consell, las contrataciones a través de la bolsa han subido considerablemente al pedir que cumplieran el proceso legal.