VALENCIA (VP/EP). La artista valenciana Paula Bonet (Vila-real, Castellón, 1980) regresa a las librerías con su nueva obra, 'La Sed', en la que combina imagen y texto desde la más absoluta libertad creativa, ya que lo que valora en los autores que sigue y admira es que "no repiten patrones". A la pintora no le da miedo arriesgarse a no reproducir las fórmulas que le han dado el éxito. "Para mí el éxito es dedicarme toda la vida a lo que me gusta aunque tenga menos repercusión", asevera.
Así lo ha asegurado Bonet en una entrevista concedida a Europa Press con motivo de la presentación en Valencia -en el Octubre Centre de Cultura Contemporània a las 19.00 horas- de 'La Sed'(Lunwerg). nTras el éxito de su primer libro en solitario, 'Qué hacer cuando en la pantalla aparece The End', la pintora e ilustradora valenciana se convirtió en un referente el panorama de la nueva ilustración española. Desde entonces, ha crecido artísticamente y ha ido despertando una gran expectación por su nuevo trabajo que ve ahora la luz.
'La Sed' supone un canto a la soledad y a la igualdad acudiendo a las enseñanzas de creadoras a las que la artista admira, mujeres que consiguieron expresarse a través del arte, como Anne Sexton, Maria Luisa Nombal, Sylvia Plath, Teresa Wilms Montt, Camille Claudel o Virginia Woolf. Aunque en un principio el proyecto iba a ser un homenaje explícito a estas creadoras, finalmente la autora valenciana se decidió por introducir la ficción y utilizar como eje narrativo la vida de una mujer --Teresa-- que se desdobla en dos personajes "para intentar demostrar lo poliédricos que somos y la necesidad de huir de los encasillamientos que nos acaban mutilando", explica Bonet.
A través de más de 300 páginas, 'La Sed' supone un regreso a las técnicas plásticas en las que Paula Bonet se formó y se siente "más libre" -el grabado y el óleo- y propone al lector-espectador un recorrido que se abre con una primera parte "más dura y cruda, que se queda en los huesos" para continuar con una narración resuelta con el dibujo y un final más "liberador y luminoso". La creadora ha agradecido la buena acogida que está recibiendo el volumen y que el público esté "comprendiendo con gran naturalidad y respetando" que en este momento "no podía hacer otro libro que no fuera 'La Sed'".
"Lo que valoro en la gente a la que sigo, admiro y consumo es que no repitan patrones ni fórmulas que funcionen sino que siguen la libertad del autor. Tras el éxito de 'The End' hubo una cierta confusión porque se me presentaba a mí más como fenómeno que a mi trabajo. Mi objetivo no es sumar likes en redes sociales. Para mí el éxito no es que unos dibujos gusten mucho y se quieran estampar en superficies, sino dedicarme toda la vida a lo que me gusta aunque tenga menos repercusión; prefiero frenar un poco esa exposición pública", ha argumentado.
Respecto a la inspiración feminista de su producción, Bonet la asume sin complejos y defiende: "Todavía hay un gran sector de la sociedad que recibe el feminismo como una amenaza cuando su objetivo es conseguir la igualdad de géneros, que es algo, lógicamente muy positivo para la mujer, pero también para el hombre, que se liberaría de una serie de lastres con los que no tiene por qué cargar".