Veladores instalados en la calle Castaños de Alicante.ALICANTE. El grupo municipal del PSOE en el Ayuntamiento de Alicante ha reclamado este martes la comparecencia del alcalde, Luis Barcala, "en el marco de la Comisión de Servicios, que engloba Medio Ambiente, para dar cuenta de las actuaciones que prevé adoptar el Ayuntamiento para cumplir la sentencia que obliga a proteger a los residentes del entorno de la calle Castaños de la saturación acústica", según han señalado portavoces del partido, a través de un comunicado, a colación de la resolución del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 3 que estima la demanda presentada por dos residentes del Centro Tradicional y conmina al Ayuntamiento a declarar una Zona Acústica Saturada (ZAS) en esa vía concreta.
"El alcalde no puede seguir mirando hacia otro lado mientras se vulneran derechos fundamentales de la ciudadanía. Si hemos llegado a este punto ha sido porque Barcala está instalado en la pasividad, hasta el punto que ni siquiera ha tenido voluntad de aprobar la ordenanza de ruido. Lleva cinco años posponiendo cumplir la sentencia de la Zona Acústica Saturada. Ahora, la justicia lo ha puesto contra las cuerdas y tiene que actuar", ha valorado el edil socialista Raúl Ruiz.
En esta línea, ha destacado que "el problema de la saturación acústica no se circunscribe a esta calle del Centro Tradicional, sino que afecta a diversas zonas de Alicante". "Es inadmisible que el gobierno del PP esté pleiteando contra las asociaciones vecinales que han presentado recursos en los tribunales para defender su derecho al descanso. Lo que debe de hacer Barcala es no seguir bloqueando la ordenanza de ruido, porque es una herramienta fundamental para poder regular las Zonas Acústicas de Saturación y para crear la mesa del ruido, de forma que estos problemas se puedan abordar garantizando la participación de los vecinos y del sector del ocio", ha incidido.
Ruiz ha recordado que Barcala, que lleva al frente del Ayuntamiento seis años, "dispone de tres estudios técnicos que avalan que se están superando los niveles de ruido permitidos en diversas calles". "Cuenta igualmente con un cuarto estudio encargado por el Ayuntamiento a la consultora Cecor en 2022 cuyas conclusiones se desconocen porque el alcalde lo mantiene oculto. Todo a pesar de que algunos de los vecinos que cedieron su balcón para alojar estos sonómetros lo vienen pidiendo hace casi un año. Ha tenido seis años para adoptar medidas y lo cierto es que no ha hecho absolutamente nada", ha concluido.
