Ximo Puig, en la Cámara de Comercio de OrihuelaVALÈNCIA. Nuevo encontronazo entre Ximo Puig y la nueva dirección federal del PSOE, esta vez a cuenta del tratado de libre comercio con Canadá. El presidente de la Generalitat y líder del PSPV ha reafirmado su apoyo al acuerdo conocido como CETA, tal y como ya hizo el pasado mes de febrero cuando anunció una misión comercial a ese país con el objetivo apoyar la presencia de empresas valencianas. La diferencia es que esta vez lo ha hecho justo después de que la nueva dirección federal encabezada por Pedro Sánchez haya dado un volantazo al posicionamiento del partido al anunciar que no apoya este tratado.
La manifestación de Puig a favor del tratado con Canadá le costó este jueves la crítica del que será su rival en las primarias que el PSPV celebrará en pocas semanas, Rafa García, y también de Podem, que aprovechó el revuelo mediático generado con el cambio de postura del PSOE para intentar desgastar al jefe del Consell.
"Para nosotros todo lo que sea que se bajen aranceles es positivo, ahora bien, si hay algunos mecanismos para mejorar en el ámbito social estoy de acuerdo", dijo Puig este jueves tras presidir la reunión del comité ejecutivo del Consejo de Cámaras de la Comunitat en Orihuela. El jefe del Consell aseguró desconocer los motivos del giro en el PSOE, porque tanto en el Parlamento Europeo como en el Congreso los socialistas apoyaron este tratado.
Al margen de que este asunto pueda servir de pretexto para ahondar en la fractura que existe entre Puig y la nueva dirección que encabeza Sánchez, el presidente de la Generalitat optó por mantener la coherencia respecto a las ventajas que él mismo aseguró en su momento que el CETA tendría para la Comunitat, que es una de las autonomías españolas que más exporta a Canadá.
El tratado supondrá la eliminación de los aranceles para los sectores del calzado, automóviles, muebles, textiles, azulejos y cerámicas y productos alimentarios preparados orgánicos. La Comunitat cuenta con un total de 404 empresas que exportan regularmente a Canadá, mayoritariamente del sector del automóvil (19%), frutas –principalmente cítricos– (15%), máquinas y aparatos mecánicos (15%), combustibles (13%), productos cerámicos (8%) y calzado (7%). En total, estas empresas realizaron exportaciones por valor de 208 millones en 2015.
Por su parte, el conseller de Economía Sostenible, Sectores Productivos, Comercio y Trabajo, Rafa Climent, consideró que el acuerdo entre la UE y Canadá podría ser "interesante" en sí mismo porque las dos economías tienen puntos para ganar en este intercambio comercial, pero asegura que las negociaciones "no se han hecho con el consenso necesario y, aunque sí que se incorporan en el texto aprobado las DO del turrón de Alicante-Jijona y los cítricos valencianos, donde el eurodiputado valenciano Jordi Sebastià ha estado luchando para su incorporación, otros han quedado fuera".
"No somos contrarios al libre comercio, pero nos importa mucho que éste se realice de una forma justa, ética y sostenible y con garantías no sólo económicas, sino sociales y medioambientales para todas las partes implicadas", añadió el conseller.
El rival de Puig en las primarias del PSPV, Rafa García, lamentó que se se cuestione una vez más "la decisión adoptada por los máximos órganos del PSOE en relación al CETA, una decisión avalada por el conjunto militancia socialista".
García instó a Puig a "aclarar si está a favor del libre comercio o de las reivindicaciones sindicales". En este sentido, ha resaltado "la contradicción" que existe entre "querer presentar un proyecto de partido de izquierdas para la Comunitat mientras se defiende la liberación del mercado incluso y posicionarse así en contra de la postura defendida por organizaciones sindicales".
Cabe recordar que el sindicato UGT es uno de los que se oponen al CETA, un rechazo que escenificó a principios de este mes con una serie de movilizaciones convocadas por la plataforma 'NO AL TTIP' contra la ratificación por parte del Gobierno central del tratado comercial con Canadá. A juicio del sindicato, el acuerdo supone "la prioridad de los mercados y entidades financieras frente al interés de los ciudadanos".
En revuelo que provocó en la UE el viraje del PSOE respecto al CETA contrasta con la "bienvenida" que le dio Podemos. Su secretario general, Pablo Iglesias, celebró que los socialistas se replanteen su apoyo al Tratado de Libre Comercio con Canadá, pero matizó que todavía "tienen mucho que demostrar".
Iglesias señaló que es "una buena noticia" que el PSOE vaya abandonar su postura de apoyo al CETA y, de esta forma, "que se vaya alejando del PP y de Ciudadanos" y "acercándose a Podemos" aunque rechazó hablar de una "podemización" de los socialistas.
Por su parte, el diputado de Podemos en las Corts Daniel Geffner criticó al presidente de la Generalitat por no sumarse al giro que ha dado su partido en este asunto y le instó a "sumarse a escuchar a la calle y al secretario general de su partido", Pedro Sánchez.
Geffner, no obstante, dijo que la postura de Puig no le sorprende porque el 15 de mayo el PSPV, junto a Ciudadanos y el PP, "votó en Les Corts en contra de una moción de Podemos en la que se reclamaba una consulta ciudadana sobre el CETA, y se solicitaba un dictamen del Tribunal Constitucional sobre su compatibilidad con la Constitución Española".
