La elección de un tipo de letra en el mundo de la moda poco tiene que ver precisamente con modas o tendencias. Y es que cada tipografía tiene connotaciones que limitan su correcto uso
VALENCIA.- Considero firmemente que debería enseñarse tipografía en el colegio, elección tipográfica, incluso composición, ya que la nueva escritura es digital y con amplias paletas de control de fuentes y estilos. De hecho, ser una sociedad sin formación en este campo es lo que ha propiciado que tipos de letra creados para usos infantiles hayan terminado impresos en multas de tráfico e informes médicos o mostrados en webs corporativas de aseguradoras y funerarias, lo cual transmite poco rigor, desconcierto y falta de profesionalidad, como si nos entregasen una mala noticia envuelta en un gran y vistoso lazo rosa.
En el mundo de la moda tienen la lección aprendida desde hace décadas, y saben que escoger un tipo de letra poco tiene que ver precisamente con modas o tendencias, y es que cada tipografía tiene connotaciones que limitan su correcto uso. Históricas marcas de ropa, logotipos de diseñadores y modistas, las tiendas más lujosas o el branding de los mejores cosméticos, cada sector tiene muy claro el target que busca y, como proceso de comunicación que es el diseño, ha de escoger el idioma en el que se comunica.
(Lea el artículo completo en el número de octubre de la revista Plaza)