VALÈNCIA (EP). Los Veintisiete han dado este martes luz verde definitiva a la ayuda macrofinanciera de 1.000 millones de euros para responder a las necesidades financieras inmediatas de Ucrania tras la invasión rusa del país, un apoyo que se añadiría a los 1.200 millones en préstamos de emergencia concedidos durante el primer semestre y que está condicionado a reformas y mayor transparencia en la gestión de los fondos.
La Comisión Europea planteó el pasado mayo que la ayuda llegara hasta los 9.000 millones y los jefes de Estado y de Gobierno le encargaron entonces una propuesta más detallada que, por el momento, sólo se han concretado con este primer programa de 1.000 millones.
En este caso, los fondos tendrán la forma de un préstamo a largo plazo en condiciones favorables para respaldar la estabilidad y resiliencia macroeconómica del país pese a la invasión rusa.
Para ello, la Comisión tomará prestados fondos en los mercados internacionales de capital y transferirá los ingresos en las mismas condiciones a Ucrania. Este préstamo a Ucrania estará respaldado en un 70 por ciento del valor por importes reservados con cargo al presupuesto de la UE.
Con el visto bueno ya del Consejo y de la Eurocámara, Bruselas debe firmar ahora con Ucrania el Memorando de Entendimiento (MoU) y el acuerdo de préstamos para fijar los objetivos y reformas a las que estarán sujetas las ayudas y proceder al desembolso de fondos.
Según el Fondo Monetario Internacional (FMI), Ucrania necesita 39.000 millones de dólares (37.300 millones de euros) para satisfacer sus necesidades de financiación para este 2022.