CASTELLÓ. El sector azulejero castellonense ya no se muestra preocupado por un posible Brexit duro. La continuidad de las negociaciones entre la Unión Europea y Reino Unido, en un acuerdo que se alcanzó este domingo, lejos de verse envueltas en un halo de esperanza, se ven por los responsables de la patronal Ascer prácticamente como algo externo y su resultado no supone un quebradero de cabeza para ellos, a diferencia de lo que ocurría hace poco más de un año.
Aunque reconoce que la salida desordenada de la UE supondría más "piedras en el camino", el vicepresidente de Ascer Ismael García afirma rotundo: "Más del 80% de la exportación lo facturamos a países que no están en la Unión Europea. Sabemos exportar". Todo un cambio de perspectiva. Y el mismo punto de vista tiene el secretario general de la patronal azulejera, Alberto Echavarria: "Siempre es negativo, pero salvando el puntual arancel, la situación no será un drama mientras sepamos cómo afrontarla".
A tener esta percepción ayuda, sin duda, el hecho de que, a pesar de que la exportación a las islas británicas está cayendo de forma destacada este año, las ventas en el extranjero no se han resentido y siguen creciendo en este 2020, según ha anunciado García este mismo lunes.
En concreto, las ventas en Reino Unido caían, hasta septiembre (último dato disponible) un 12,8%, el segundo mayor descenso tras el 14% de Marruecos, que durante muchos meses ha cerrado prácticamente el país a la llegada de productos foráneos para tratar de frenar al coronavirus. A pesar de ello, la caída global de los envíos de azulejos y baldosas al cierre del tercer trimestre era de solo el 0,8% (2.133 millones de euros) y ahora ya está en cifras positivas.
Aun así, el mercado británico todavía era en septiembre el tercero en importancia para los fabricantes castellonenses. Pero esto no parece suponer una preocupación para sus dirigentes. "No trabajamos con perecederos; [el hipotético Brexit duro] nos perjudicará hasta que los clientes se den cuenta de que el servicio continúa", concluye García, quien destaca así el prestigio que el azulejo español tiene en las islas.