Fotos: ANTONIO PRADASCASTELLÓ. El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias pretende tener renovada en su totalidad la vía entre Sagunt y Teruel en el verano de 2021 y que esté electrificada en 2023. Estos son los plazos que maneja para materializar los diferentes proyectos en este recorrido, que comprenden una inversión de 386 millones de euros para estos 138 kilómetros.
El director general de Conservación y Mantenimiento de Adif, el torrentí Ángel Contreras, resalta que en el "primer semestre" de 2021 está previsto acabar los 22 meses de trabajos que comenzaron el 9 de julio pasado y que permitirán adecuar unas instalaciones fundamentales para el tráfico de mercancías, sobre todo para el puerto de València y también para PortCastelló, que espera captar nuevos tráficos gracias a la adecuación ferroviaria.
Las actuaciones de renovación de vía, y las de seguridad y electrificación que continuarán posteriomente, permitirán incrementar la capacidad de la vía única que une la capital del Camp de Morvedre y la turolense, así como aumentar la longitud de los trenes hasta los 750 metros, el estándar europeo, de forma que su circulación sea más rentable.
Para ello, un paso fundamental ya se dio con la supresión de ocho limitaciones de velocidad en el tramo y la instalación del sistema de seguridad tren tierra (la comunicación entre los maquinistas y el centro de control) durante los dos últimos años. Esto ha permitido, según ha recordado Contreras, que se haya pasado de los 3 de mercancías anteriores, a los 34 que estaban circulando previamente al cierre de la línea para llevar a cabo los trabajos actuales.
En las obras que se están llevando a cabo en la actualidad, Adif está instalando en todo el recorrido 180.000 traviesas polivalentes que permiten la implantación del ancho ibérico o del internacional, pero no de ambos a la vez (es decir, no son aptas para albergar el conocido tercer carril). El organismo dependiente del Ministerio de Fomento utiliza estas traviesas, ha explicado Contreras, porque son "las estándar" que usa actualmente, pero no porque en la línea esté previsto instalar el ancho europeo.
Y es que el director de Conservación y Mantenimiento de Adif, que este martes ha encabezado la visita a las obras del ferrocarril en el tramo valenciano, no se ha querido pronunciar sobre la posibilidad de que, una vez que el Corredor Cántabro Mediterráneo de Sagunt a Zaragoza cuenta con vía libre para ser incluido como prioritario entre las redes transeuropeas, esto pueda suponer la llegada de más financiación del Ejecutivo comunitario y esto conlleve a su vez la implantación del ancho internacional.
Las obras de renovación de la vía, que está previsto concluyan antes del verano de 2021, se solaparán así con las de electrificación. Y es que actualmente se está redactando este proyecto, ha señalado Contreras. En Adif prevén que la implantación de las catenarias pueda comenzar en el último trimestre de 2020, una vez se estén construyendo ya las diferentes subestaciones eléctricas que abastezcan al tendido de los 25.000 voltios necesarios para la circulación de los trenes. Para materializar las subestaciones todavía resta que el proyecto del tramo entre Sagunt y Teruel obtenga la Declaración de Impacto Ambiental, ha dicho.
Asimismo, un paso fundamental para aumentar la capacidad de la línea es la modificación del actual sistema de seguridad para implantar el Bloqueo Automático en Vía Única (BAU). La instalación de las nuevas balizas que esto comprende permitirá dividir los recorridos entre estaciones para que puedan circular varios trenes, uno tras otro, en estos tramos. Actualmente el sistema solo permite la circulación de un convoy a la vez entre estación y estación, con lo que así se aumentará la frecuencia.
