Clientas en la tienda de Ale-Hop en la plaza del Ayuntamiento de València. Foto: EVA MÁÑEZALICANTE. La compañía alicantina Clave Dénia, o lo que es lo mismo, Ale-Hop, no para de multiplicar sus beneficios cada año que pasa. Las cuentas consolidadas del grupo correspondientes a 2017 reflejan un incremento en el resultado neto del ejercicio del 35%, hasta rozar los 24 millones de euros. En 2016, el aumento en el beneficio ya fue del 43% (17,6 millones), tal como publicó Alicante Plaza, y un año antes la mejora del resultado había sido también del 43% (12,3 millones). Así, desde 2014 (8,6 millones) la firma fundada por Vicente Grimalt en Ondara prácticamente ha triplicado sus ganancias.
La explicación obedece a dos razones fundamentales: de un lado, el enorme margen sobre ventas (del 66%) que es capaz de generar la empresa, que desde 2001 ha modernizado el concepto del 'todo a cien'. De otro, el constante crecimiento de su red comercial, en la que apuesta por la venta física en puntos muy concurridos de las principales ciudades. Así, Ale-Hop cerró el año 2017 con 153 tiendas, de las que 108 son en propiedad y el resto (45) con cesión de marca. De esta forma, la enseña de Ondara levantó la persiana de 23 nuevos establecimientos, de los que cuatro (tres en Portugal y uno en Vigo) siguen la fórmula de la cesión de marca.
El aumento de la red comercial ha contribuido lógicamente a elevar las ventas de la compañía, aunque el informe de gestión adjunto a las cuentas destaca que la facturación "a tiendas comparables" (es decir, sin contar las nuevas aperturas) "también ha aumentado significativamente, mejorando la rentabilidad". Así, según las cuentas consolidadas, Clave Dénia facturó un total de 98,33 millones de euros, un 24,6% más que el año anterior (78,93 millones). El resultado antes de impuestos superó los 30 millones y el beneficio neto al cierre del ejercicio se quedó en 23,85 millones de euros.
A finales de 2017, según indica el informe de gestión, se iniciaron los trabajos de la nueva plataforma logística de la enseña de la vaca en la localidad valenciana de Bellreguard. Entre esta obra y la apertura y mejora de instalaciones, la inversión en inmovilizado material ascendió a 4,26 millones de euros en 2017. Todas las inversiones se afrontan con recursos propios, sin acudir a financiación bancaria. La plataforma logística de Bellreguard, iniciada tras "salvar el apartado burocrático, que nos ha llevado casi un año", dispondrá de 20.000 metros cuadrados y capacidad para unos 39.000 palets.
El informe apunta, además, a una previsible consolidación de la espiral de crecimiento en la que se halla inmersa la firma de Grimalt. Al cierre de las cuentas de 2017, en febrero de este año, ya se apreciaba un incremento "sustancial" de la facturación, y la empresa avanzaba que tenía previsto seguir aumentando su red de tiendas. En los últimos meses, de hecho, ha abierto su primera tienda propia en un aeropuerto, en València, y su primer establecimiento en las Islas Baleares, donde aún no tenía presencia. Asimismo, el informe avanza que la firma tiene previsto iniciar el estudio de un nuevo modelo de tienda.
La buena marcha de la firma, lógicamente, se traslada también a la creación de empleo. Clave Dénia empleó a una plantilla media de 670 empleados durante el pasado ejercicio, por los 543 de 2016. El gasto en personal, obviamente, se incrementó de forma notable, al pasar de 13 a 17 millones de euros. En cambio, la empresa controló el incremento del gasto en aprovisionamientos, que solo subió un 14% hasta 34,6 millones de euros.
