Stand de Confectionary Holding en la feria de alimentación de Alemania, el pasado eneroALICANTE. Confectionary Holding, el grupo propietario de las marcas de turrón y dulces navideños 'El Lobo', '1880' y 'Doña Jimena', regresó en el ejercicio cerrado en marzo de 2018 a la senda del beneficio, a pesar de que facturó algo menos que el año anterior. Concretamente, un 2% menos hasta 20,4 millones (frente a los 20,8 millones del ejercicio 2017).
Pese a la ligera caída de los ingresos, el grupo que dirige Andrés Cortijos logró cerrar el ejercicio en números negros, aunque testimoniales: apenas 40.000 euros de ganancia, frente a los 1,6 millones de pérdidas del ejercicio anterior. La clave para mejorar el resultado fue un mayor control de los aprovisionamientos y la contención en los gastos de personal, que permitieron equilibrar el resultado de explotación, combinado con un mejor resultado financiero.
El informe de gestión adjunto a las cuentas consolidadas del grupo destaca que el ejercicio finalizado en marzo de 2018 estuvo "marcado por la volatilidad de las materias primas y la difícil situación macroeconómica", pero sin embargo la firma consiguió "nuevos clientes y mayores ventas en los productos tradicionales de nuestra principal marca". El precio de las materias primas, fundamentalmente, frenó la mejora del resultado de explotación. Con todo, Confectionary Holding logró salir de pérdidas después de dos ejercicios consecutivos.
Por mercados, Confectionary Holding facturó más del 80% de sus ventas en España, mientras que la exportación supuso cerca del 20% restante. Por productos, la gran mayoría de ingresos llegaron a través de la venta de turrón (19,6 millones), aunque el grupo también obtuvo ingresos por la venta de materias primas (cuenta con sus propias filiales dedicadas al cultivo de almendra en Marruecos) y otros productos (en 2013 compró la toledana Doña Jimena). El grupo cerró el ejercicio con una plantilla media de 227 empleados.
Confectionary Holding viene apostando desde hace años por la innovación en su sector, tanto con nuevos productos como con nuevas presentaciones de los clásicos. En estos momentos la firma está creciendo en otras categorías de alimentación dulce no navideña para estar presentes en el mercado durante todo el año. Una nueva línea de snacks saludables de sus dos principales marcas (El Lobo y 1880), cremas untables concebidas para un desarrollo multicanal (distribución, horeca e industrial) y galletas rellenas de turrón El Lobo son sus principales apuestas para desestacionalizar su producción.
