ALICANTE. El gigante de los frutos secos Calconut, líder español en este sector, ultima la puesta en marcha de su nuevo centro de producción en la localidad alicantina de Mutxamel, que prevé tener a pleno rendimiento a mediados del próximo mes de junio. Hasta el momento la firma almeriense ha llevado a cabo una inversión de 13 millones en las instalaciones (inicialmente estaban previstos 12), donde ya tiene entre otra maquinaria la nueva línea de repelado, pero el centro se dará por terminado y funcionará a pleno rendimiento a mediados de año, cuando está previsto llevar a cabo una inauguración oficial.
Así lo han explicado a Alicante Plaza fuentes de la empresa, que ha transformado sus anteriores instalaciones en Mutxamel en uno de sus centros más avanzados, con sistema de trazabilidad blockchain y etiquetado QR en el proceso de fabricación. Mutxamel se convertirá así a partir de junio en el centro estratégico para todas las operaciones de comercio internacional de la compañía, además de fábrica de procesado y envasado y almacén de materia prima.
La nueva nave de Calconut consta de dos plantas para oficinas de 1.200 metros cuadrados, donde se ubicarán todos los departamentos (dirección, recursos humanos, logística, financiero, marketing, I+D, calidad, compras, ventas, informática y contabilidad), además de un garaje de 1.200 metros y una cubierta tipo terraza con las mismas dimensiones. Para el almacén, pieza fundamental en el nuevo proyecto, se ha realizado una reserva de cuatro módulos independientes con un total de 6.700 metros con la previsión de cubrir futuros incrementos de la demanda.
La firma líder en el sector de fruto seco en España ha apostado claramente por la economía circular en la nueva planta, y buena parte de la inversión está destinada no solo a modernizar sus procesos, sino a hacerlos más sostenibles. Así, ha instalado 500 kW de energía solar en la cubierta, lo que permitirá disminuir notablemente sus emisiones de CO2 a la atmósfera. También ha dispuesto que el agua usada en los distintos procesos industriales sea reciclada y reutilizada, y aplicará diseño biofílico, que integra la naturaleza en las oficinas para conseguir entornos saludables.
Este moderno centro tecnológico y de producción contará con la línea de repelado más potente del mercado, una máquina capaz de repelar cinco toneladas de almendras a la hora. Una vez que se halle en pleno funcionamiento, Calconut tiene previsto generar biomasa a partir de la cáscara de almendra que se deseche, así como de la de otros frutos secos. De este modo, logrará alcanzar el objetivo de generar cero residuos orgánicos, meta también perseguida con el uso de energía renovable. También con el objetivo de reducir los residuos, la compañía eliminará de sus oficinas cualquier tipo de plástico de un solo uso y está mejorando los envases de sus productos al por menor, con papel 100% reciclable.
Calconut comercializa frutos secos, semillas, legumbres, fruta desecada y especias. Fundada en 2005, sus orígenes se remontan décadas atrás por su dilatada tradición familiar en el sector. En estos años, la compañía se ha consolidado como una de las empresas líderes del sector de los frutos secos. Presente en 60 países, cuenta con sedes en Alicante y Almería, y el pasado ejercicio facturó cerca de 140 millones de euros, con un incremento del 7% en su volumen de negocio respecto a 2018. Con una plantilla superior a las 70 personas, la apertura de Mutxamel creará 50 empleados adicionales.