El universo Pamesa: seis marcas, nueve centros logísticos y más de mil camiones diarios cargados

6/06/2021 - 

CASTELLÓ. Pamesa Grupo Empresarial, que este año ratificará su reinado como el mayor fabricante europeo de azulejos y baldosas -para lo cual espera alcanzar una facturación de su división cerámica de 900 millones de euros, lo que supone prácticamente un cuarto de las ventas totales del sector español-, constituye, en sí mismo, todo un universo cerámico. 

Para comprobarlo solo hace falta echar un vistazo a algunos de sus números. Más allá de los ingresos y los resultados obtenidos (este año superará los "100 millones", aseguró su presidente, Fernando Roig, en la rueda de prensa en que desgranó los resultados el pasado miércoles), las cifras que rodean su actividad son significativas. 

Las seis marcas que lo componen (Pamesa, TAU, Geotiles, Prissmacer, Navarti y Ecoceramic) cuentan con nueve centros logísticos para almacenar y distribuir su producto. Solo estos centros ocupan una superficie de 730.367 metros cuadrados o, lo que es lo mismo, 102 campos de fútbol. Esta cantidad de terreno es mayor que el término municipal de Geldo, el municipio más pequeño de la provincia, de 0,56 Km2.


De estos centros logísticos parten, cada día, 1.025 camiones y contenedores cargados de producto del grupo, que este año superará los 130 millones de metros cuadrados de revestimiento cerámico producido en sus instalaciones. 

La concentración vertical, solo hacia abajo

Asimismo, entre sus nichos de negocio, y también como vía para reducir costes, el grupo trata de concentrar en vertical actividades vinculadas con la fabricación de azulejos. Lo ha hecho, a través de Incogas, con el suministro de gas a sus factorías y también a otras. Pero también con las plantas de materias primas. Tras finalizar la más reciente de Onda, actualmente está construyendo otra de 52.000 m2 en Castelló de la Plana, junto a las instalaciones de TAU. 

Y esto lo extiende a la obtención de arcillas, para lo que cuenta con dos minas en Galve y Seno, en Teruel, y espera sumar otra en Estercuelas, también en la provincia vecina, así como una en El Puig, aunque la tramitación para esta se prolonga ya más de ocho años. 

En esta concentración vertical, el grupo también ha anunciado recientemente su intención de pactar con navieras y transitarias para tomar el control de la distribución de sus productos entre los 150 países de todo el mundo en los que vende. Pero esta labor de concentración finaliza ahí, a las puertas de los 8.665 clientes con los que trabaja. Y es que, según reconoce Roig, entre sus previsiones no se encuentra la apertura de tiendas con que vender directamente: "Nosotros somos fabricantes y no hemos sido buenos comerciantes; yo me considero un buen fabricante y queremos ser los mejores". 

Y a fe que lo está consiguiendo. Un crecimiento como el vivido en los últimos años (ha quintuplicado la facturación en una década) y el previsto para el presente ejercicio, del 45%, está al alcance de muy pocas compañías.

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