Buceadores de Salvamento Marítimo se preparan para una inmersión. Foto: PORTCASTELLÓCASTELLÓ. Los ocho tripulantes del Nazmiya Ana, que el pasado viernes perdieron a uno de sus compañeros, de tan solo 22 años, esperan en un hotel del Grau el momento de regresar con sus familias. La tripulación, de origen indio, turco y egipcio, se aloja en un hotel desde el viernes, cuando el mar también se tragó las pertenencias que les acompañaban en el buque.
Es la consignataria de la embarcación la que les buscó alojamiento tras el trágico suceso acaecido en el Muelle de la Cerámica. Asimismo, el Ayuntamiento de Castelló, a través del albergue municipal, les ha proporcionado "ocho lotes de ropa y 120 mascarillas FFP2" para tratar de volver, en lo posible, a la normalidad, señala la concejala de Bienestar Social, Mary Carmen Ribera.
Además, la ONG Stella Maris, que se dedica a estas labores a lo largo y ancho del mundo, está permanentemente en contacto con los marineros y el capitán del navío de bandera panameña para atenderlos en aquello que necesiten.
Por su parte, la Guardia Civil, además de la investigación judicial, se está encargando de todos "los trámites ante la embajada" para la repatriación del cuerpo del marinero fallecido, señala el presidente de la Autoridad Portuaria de Castellón, Rafa Simó.
