ALICANTE. María Teresa Pérez Díaz (Petrer, 1993) es una de las más diputadas más jóvenes del nuevo Congreso de los Diputados (es posible que presida la mesa de constitución del nuevo hemiciclo). Nieta e hija de aparadoras del calzado, esta estudiante de Periodismo ha conseguido un acta de parlamentaria en Madrid cuando las encuestas no auguraban tanto éxito para la formación de Pablo Iglesias. Además de su grado por la Universidad Carlos III, tiene un máster de Política Mediática en la Universidad Complutense de Madrid y otro de Comunicación Audiovisual en la Universidad Rey Juan Carlos. Irradia ilusión por los cuatro costados y con ánimos por cambiar el mundo. Lo primero, según ella, las condiciones de un sector como las de las trabajadoras del calzado que trabajan en negro en su casa o en talleres ilegales. También clama, como el resto de la organización, por formar parte de gobiernos de coalición con el PSOE. Esta su conversación con Plaza.
-Más allá del resultado, ¿qué sensaciones te transmitió la campaña electoral?
-Fue una campaña reveladora y se ha demostrado que cuando la participación es tan histórica, refleja que España es un país mejor de lo que nos hacían creer, y que en Alicante tenemos una provincia progresista. Salimos en masa a parar a la extrema derecha, y los resultados en general han demostrado que el multipartidismo ha venido para quedarse: se han acabado los tiempos de los gobiernos monocolores y del bipartidismo. Ahora, es imprescindible generar consensos y entendernos. En ese sentido, desde Unidas Podemos creemos que hemos sacado un resultado suficiente para nuestros objetivos, que eran frenar a la derecha y construir un gobierno progresista. Pedro Sánchez debe escuchar a su militancia, que le gritaba que con ¡Rivera, no¡. Se equivocaría si apuesta por gobernar solo, pues sería hipotecarse hacia la derecha para sacar un presupuesto o cada ley. Sería un gobierno débil y muy inestable. Nuestro objetivo ahora es trabajar para conseguir un gobierno de coalición, y de estabilidad.
"LOS QUE QUERÍAN VOLVER A UN PAÍS EN BLANCO Y NEGRO NO LO HAN CONSEGUIDO Y DEMUESTRAN QUE SOMOS UN PAÍS DIVERSO Y MULTICOLOR"
-¿A qué atribuyes la alta participación a la posibilidad de que se diera un tripartito de derechas?
-Se ha debido a varios factores. En un alto grado, por supuesto, a frenar a las derechas, lo cual refleja que somos la España del 15M y del 8M. En gran parte han sido las mujeres las que han inclinado la balanza. La aparición de Vox, aunque sólo sea con un escaño, ya es una mala noticia que entren en el Congreso. Pero bueno, no han ganado y no suman, aunque se vaticinara lo contrario. Los que querían volver a un país en blanco y negro no lo han conseguido y demuestran que somos un país diverso y multicolor.
-Hace unos meses, las encuestas no eran buenas para Unidas Podemos… ¿cómo le habéis dado la vuelta?
-Hemos hecho una buena campaña. La participación ha sido lo más revelador, pero también se ha demostrado que la unidad suma. Y hemos tenido la mano tendida a las fuerzas políticas progresistas, y no pudo ser la confluencia con Compromís. Lo intentamos hasta el final y respetamos las decisiones de cada uno, pero se ha demostrado que la unidad es un elemento fundamental. Y el electorado lo ha valorado. Se ha demostrado que ha habido cierto voto útil hacia Unidas Podemos y eso se refleja con el voto dual. Hemos conseguido 127.000 votos de los alicantinos a los que no vamos a defraudar.
-Os habéis volcado mucho en los colectivos con empleos precarios, como aparadoras, kellys, taxistas. ¿qué es lo primero que váis a reivindicar en Madrid?
-La participación de la sociedad civil en política es imprescindible, y es lo en Unidas Podemos nos marca el rumbo. Hemos trabajado con muchos colectivos, y especialmente, a mi me toca el colectivo de las aparadoras. Y hay muchos cambios que se podría hacer para mejorar su situación. La precariedad debe dejar de tener rostro de mujer y no nos podemos resignar a trabajar y vivir en unas condiciones que no nos merecemos. Tenemos el lamentable honor de liderar junto Andalucía el ranking de sanciones por economía sumergida. No puede seguir pasando en un sector que es estratégico para nuestra economía. A partir de dar visibilidad, se puede intensificar la labor de la Inspección de Trabajo en empresas, que haya un sello de calidad,
-Os habéis volcado mucho en los colectivos con empleos precarios, como aparadoras, kellys, taxistas. ¿qué es lo primero que váis a reivindicar en Madrid?
-La participación de la sociedad civil en política es imprescindible, y es lo en Unidas Podemos nos marca el rumbo. Hemos trabajado con muchos colectivos, y especialmente, a mi me toca el colectivo de las aparadoras. Y hay muchos cambios que se podría hacer para mejorar su situación. La precariedad debe dejar de tener rostro de mujer y no nos podemos resignar a trabajar y vivir en unas condiciones que no nos merecemos. Tenemos el lamentable honor de liderar junto Andalucía el ranking de sanciones por economía sumergida. No puede seguir pasando en un sector que es estratégico para nuestra economía. A parte de dar visibilidad, se puede intensificar la labor de la Inspección de Trabajo en empresas, que haya un sello de calidad,
integrar a kellys aparados en el régimen de la Seguridad Social y tener la posibilidad de acogerse a la jubilación anticipada su penalización. Porque en muchos casos se debe a problemas de salud derivados de desempeño de trabajo. Lo que no puede ser, en el caso de las aparadoras, es que cobren 15 céntimos por hacer un par de zapatos o 2 ó 3 euros por hora en un sector que gana millones de euros. O que tengan un problema de huesos y no se lo reconozcan la mutua o no se lo pueden tratar por la Seguridad Social. Eso es imprescindible, hay que cuidar a los sectores estratégicos y defender los derechos laborales de todos los colectivos. Y en el caso de la industria del calzado, hay que llegar al siglo XXI.
"UNA ECONOMÍA QUE FACTURA TANTOS MILLONES, COMO EL CALZADO, NO PUEDE ESTAR BASADA EN HACER FACTURAS SIN IVA O CIRCULAR SIN CONTROL POR TALLER ILEGALES"
-La economía sumergida es algo que todos saben, que siempre ha existido, pero nadie actúa de manera eficaz…
-Es intolerable que muchas mujeres estén trabajando en su casa, en un rincón de la cocina, con un foco de luz y en condiciones lamentables o en un taller ilegal. Por eso, decimos de intensificar la presión de la Inspección de Trabajo a grandes empresas, no a los pequeños autónomos. Hay que mirar por arriba para que las mejoras lleguen a los eslabones de abajo. Es imprescindible es que las grandes empresas, además de cumplir con la Ley de Riesgos Laborables, tengan encima unos inspectores de trabajo que permitan sacar a flote la economía sumergida. Una economía que factura tantos millones no puede estar basada en hacer facturas sin IVA o circular sin control por taller ilegales. Las empresas deben saber que también les beneficia trabajar de otro modo.
-¿Por qué desde Podemos se insiste tanto en entrar en los gobiernos de coalición con el PSOE?
-Porque creemos que los resultados han demostrado que no quieren un gobierno monocolor. Esa época ya se acabó. Tenemos que entendernos y llegar a consensos para que sean una representación de lo que se ha votado. Somos la llave del Gobierno, tanto en la Comunitat Valenciana como en Madrid y es imprescindible que estemos en un ejecutivo porque es de ahí donde se pueden cambiar las cosas. Y porque solo Podemos va a empujar y arrancarle las medidas que necesitan las mayorías sociales. Ya pasó con los PGE, que arrancamos el salario mínimo, y desde dentro del Gobierno podríamos hacer mucho más. Unidas Podemos es la fuerza más útil para cambiar las cosas desde dentro del Gobierno.
"Unidas Podemos es la fuerza más útil para cambiar las cosas desde dentro del Gobierno"
-Ahora vienen las municipales, ¿podrá Unidas Podemos mantener el nivel de voto o se vota diferente en cada elección?
-Lo que creo es que nos vamos a dejar la piel en una campaña más. Los municipios son imprescindibles, los ayuntamientos son la administración más cercana al ciudadano y tienen que estar al servicio de su pueblo. Nuestra prioridad es ganar muchos municipios para ganar las cosas más concretas que afectan al día a día de la vida de los vecinos.
