CASTELLÓ. El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, ha destacado que el Pla Convivint de Infraestructuras Sociales, que desarrolla la Vicepresidencia y Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas de forma conjunta con el resto de administraciones públicas, es un modelo del "proyecto de progreso, solidaridad y justicia social" en el que trabaja el Consell desde 2015.
Puig ha visitado, junto con la vicepresidenta y consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, la nueva residencia municipal de personas mayores de Vinaròs, que es una de las instalaciones incluidas en este plan. Allí ha subrayado que las instalaciones representan precisamente un "símbolo" del modelo asistencial que promueve el Gobierno valenciano.
"En la pandemia hemos visto lo importante que es el trato que se le da a los mayores; es un cuestión de dignidad y de decencia de la propia sociedad", ha dicho el máximo responsable del Consell, que ha remarcado también el esfuerzo que viene realizando la Generalitat para "generar políticas que favorezcan la vida de las personas, sobre todo de las más vulnerables".
"Un atributo fundamental de lo que pensamos que ha de ser el futuro de la Comunitat Valenciana es la inclusión en todos los ámbitos de la vida", ha señalado también Puig, quien espera que se pueda avanzar "lo más rápidamente posible" en el pla Convivint, porque, "sin duda, las personas mayores de la Comunitat Valenciana se lo merecen".
Por su parte, la vicepresidenta ha resaltado que este proyecto, "esperado durante mucho tiempo", es el primero que incorpora todos los aprendizajes adquiridos durante la Covid-19 y responde al "nuevo modelo residencial impulsado por la Vicepresidencia y Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas mucho antes de la pandemia, pero que ha revelado lo importante que era".
En este sentido, ha explicado que la residencia de Vinaròs se basa en la estructuración de las estancias como módulos convivenciales, de manera que el centro "se asemeje lo más posible a un hogar". Cada unidad convivencial, ha señalado Oltra, está configurada como una casa en la que conviven entre 15 y 25 personas y, por tanto, "no hay un comedor para 200 personas ni pasillos con habitaciones juntas que parecen una institución o un hospital".
Este modelo, ha destacado, hace ser más resilientes ante posibles pandemias, "porque el aislamiento es más fácil, pero también hace más amables y más próximos los espacios de manera que se configuran como una familia". La vicepresidenta ha explicado que el centro para personas mayores de Vinaròs, que forma parte del Pla Convivint, cuenta con una capacidad de 145 plazas, de las que inicialmente 85 serán financiadas por la Generalitat a través de una inversión de 1,8 millones de euros.
El Pla Convivint de Infraestructuras de Servicios Sociales supondrá una inversión de 561 millones de euros para la reforma o puesta en marcha de 247 instalaciones, que permitirán la creación de 6.600 nuevas plazas públicas en residencias y centros de día para los colectivos más vulnerables, como las personas mayores, con diversidad funcional o salud mental.
El plan, que se financiará con fondos propios de la Generalitat, así como con los procedentes de las ayudas europeas y algunas aportaciones municipales, tiene entre sus objetivos la cobertura de las necesidades y el avance hacia la equidad territorial, junto con la finalización de obras pendientes de planes puestos en marcha por anteriores gobiernos, y la lucha contra la despoblación, mediante la puesta en marcha, en este último apartado, de servicios de proximidad en el ámbito rural y de interior.
En el ámbito de personas mayores, Convivint contempla 100 actuaciones y una inversión de 279 millones de euros, que permitirán duplicar el número de residencias públicas y multiplicar por 12 los recursos de atención diurna, además de instalar puntos de atención en la proximidad en el mundo rural, que consistirá en un centro de día con extensiones que serán gestionadas por el mismo personal, y que en su mayoría estarán en la provincia de Castellón.
La magistrada apunta a irregularidades administrativas y al desequilibrio en la distribución del dinero, pero no aprecia ilícito penal
