VALENCIA. Cuidado: frágil. La sala Gallera se vestirá mañana con un total de 1.400 copas de cristal, una estructura de vidrio que, como si de una muñeca matrioska se tratara, replicará la forma del propio inmueble en su corazón. Se trata de la base de 'Comedias a honor y gloria', performance con la que la artista Greta Alfaro, en colaboración con el Consorcio de Museos de la Comunitat Valenciana, conquistará la sala a través de una mezcla de belleza y violencia y que servirá de prólogo a la exposición que inaugurará el próximo 8 de abril.
El título, que proviene de los versos de Lope de Vega, engloba una obra que quiere reflexionar sobre el papel del público en tanto que actor y espectador, un ciudadano que nada en la lucha entre la libertad y la opresión. "No hay civilización sin estabilidad social. No hay estabilidad social sin estabilidad emocional", con estas palabras daba la bienvenida Aldous Huxley en 1932 a los lectores de Un mundo feliz, distopía que parece resumida en la obra de Alfaro. "La performance juega con la tradición del teatro participativo, un paralelismo con nuestra relación con la obra, una reflexión sobre el rol del espectador del mismo modo en que hoy participa del flujo de imágenes a través de dispositivos móviles y redes sociales. Es un espectáculo interactivo", explica Greta Alfaro.
Las copas de cristal, rellenas de unos 300 litros de vino tinto, reposaran durante poco tiempo las unas sobre las otras, pues nacen para morir. El público será el encargado de matar a balazos la obra ideada por Alfaro, que invitará a los participantes a disparar uno a uno a la construcción hasta que quede hecha el mil pedazos. La violencia, la destrucción, no será anónima. Un Gran Hermano materializado en tres cámaras de seguridad que grabarán el proceso y un miembro de seguridad harán la de sociedad opresora y vigilante frente a la locura de un pueblo privado de libertad.
Barroco y referencias religiosas
"La performance busca un espectador activo y responsable que, a través de los carteles que indican el peligro, se dé cuenta de la sociedad en la que vive. El sistema neoliberal es destructor, crea sociedades reprimidas, sujetas a un control extremo, privadas de libertad. Vivimos en esa dicotomía, somos responsables por pasividad. La reflexión es: ¿cuál es tu punto de responsabilidad? ¿realmente tenemos cosas que celebrar?", indica la artista, que ha expuesto en centros como Whitechapel Gallery, la Saatchi Gallery, el Institute of Contemporary Art de Londres o el Centre Pompidou.
Una experiencia nueva pero cargada de símbolos imposibles de disociar de la carrera de Alfaro. El vino y las copas de los bodegones, referencias al barroco y, también, religiosas. No en vano, si el vino es tinto no es cuestión de azar. Simbología que apunta directamente a la sangre de Cristo y el Santo Cáliz, objeto de destrucción es un espacio donde la iluminación acentuará la sensación dramática. La performance podrá ser vista desde el primer piso de la sala, pues la estructura de cristal alcanza el borde del balcón.
Posteriormente la sala reabrirá sus puertas el día 8 de abril inaugurando una exposición que incluye la proyección del vídeo grabado mañana jueves y que pone en tensión la lógica de los acontecimientos cotidianos, y de una instalación que se verá únicamente desde el primer piso de la sala, ofreciendo todo un escenario imposible de encontrar en la vida real, fundamentado en construcciones típicas del arte e iconografía del periodo barroco empleando elementos actuales.
Un año de performances
La propuesta de Greta Alfaro se enmarca dentro de una programación en la que el Consorcio de Museos está otorgando mayor presencia al lenguaje de la performance, no sólo como actividad complementaria a una exposición sino como proyectos concretos. En los últimos meses, el Centro del Carmen también ha acogido varias performances, como las realizadas en el entorno de las exposiciones ‘Un ataúd en el Purgatori’ o ‘Presente Continuo. 40 años de la galería Cànem’.
Del mismo modo, próximamente, dentro de las actividades paralelas a exposición de Victoria Cano ‘Ecos y Huellas’, se podrá disfrutar de las actuaciones ‘El sonido de la huella’ (el 10 de abril) con Emilio Calandín, una interpretación de micropiezas para clarinete sobre el cuadro de Victoria Cano ‘Mensaje entre multitudes’ o la interpretación de la soprano Chelo Pons (24 de abril) ‘El Canto de los Libros’, una serie de obras musicales relacionadas con los Libros Escultura y Voladores de Victoria Cano.
Por su parte, la Sala San Miguel de la Fundación Caja Castellón inauguró este mes pasado las I Jornadas de Performance, con el apoyo del Consorcio de Museos y coordinadas por el artista Bartolomé Ferrando, profesor titular de Performance y Art Media de la Facultad de Bellas Artes de Valencia. Mostrando su apoyo a estos lenguajes se han programado tres sesiones. La primera sesión, celebrada el pasado 18 de febrero durante la inauguración de la exposición del Proyecto 3 CMCV, contó con la participación de Nelo Vilar y Carla Roca. Las jornadas continuarán el día 11 de marzo y el 9 de abril con los artistas Ángela García, Lucía Peiró, Isabel Gómez Mondragón y Lorena Izquierdo.