De este modo, se consigue "controlar la población del mosquito tigre y reducir sus niveles de tal manera que las molestias provocadas y las posibilidades de transmisión de enfermedades se reducen", ha explicado la Generalitat en un comunicado.
Se han elegido estas cinco localidades debido a su tamaño y densidad de población, y se unen a otras en las que se lleva realizando esta iniciativa desde 2016, como Polinyà del Xúquer, Albalat de la Ribera, Betxí, La Vilavella, Riola, Benicull, en las zonas residenciales de La Vallesa y La Canyada (Paterna), así como en el Parque Central de esta localidad.
En concreto, en València la zona de actuación es los jardines de Viveros; en Castelló, los parques Ribalta, Rafalafena, Roses y Geólogo José Royo. En Torrent, las áreas seleccionadas son los parques Central, Huerto de Trénor, de las Autonomías, y de Plaza de América. Parque Central y Parque del Alborgí en Paterna. También se ha puesto en marcha en el Parque del Agua, Plaza de la Glorieta y Plaza de L'Aljub en Sagunt. Todas estas zonas alcanzan una superficie de 63,65 hectáreas y la tratada es de 135,37 hectáreas.
En estas zonas se realiza la liberación de más de 2.000 machos por hectárea y semana. Estas liberaciones de machos se complementan con actividades de concienciación e información a la ciudadanía, revisión de posibles lugares de puesta y control de los imbornales donde pueda proliferar la especie. Actualmente, la capacidad de producción en los centros de la Conselleria asciende a 500.000 machos estériles por semana.
Además, se están realizando jornadas formativas por parte de técnicos de Conselleria. En los municipios de Torrent y Valencia ya se han realizado.
En la Comunitat Valenciana, el área tratada ha pasado de 45 hectáreas a 177 hectáreas en cuatro años. Desde la Conselleria se realiza un seguimiento semanal de la evolución de poblaciones. La superficie monitorizada es de 310 hectáreas, de marzo a noviembre, ambos inclusive.