CASTELLÓ. La Conselleria de Agricultura ya tramita la línea de ayudas para los productores afectados por el cotonet de Sudáfrica. En concreto, desde este martes día 15, y por espacio de veinte días, expone al público la orden con la que regulará estas subvenciones a fondo perdido.
Se trata de ayudas a los agricultores de localidades incluidas en 23 comarcas de la geografía valenciana (de las 34 totales), y abrazan tanto a productores de cítricos como de caqui. En el caso de los primeros la finalidad es aportar un respaldo económico a aquellos con, al menos, un 30% de pérdidas de producción en la cosecha a consecuencia de la afección del Delottococcus aberiae. En el caso de los caquis, además de este insecto la ayuda también cubre los daños de otras tres cochinillas algodonosas, ya que el daño de la primera es "testimonial", recoge el documento.
La orden no cuantifica las ayudas, sino que esta se determinará en la futura resolución de la convocatoria. En este sentido, los presupuestos autonómicos para este 2022 ya incluyen una partida de 3 millones de euros, tal y como avanzó Castellón Plaza. Con ello, la conselleria dio respuesta a las reiteradas demandas de los agricultores.
Ante la posibilidad (muy factible) de que los 3 millones puedan quedarse cortos, la orden establece una serie de criterios para priorizar qué productores recibirán en primer término la subvención. Así, aquellos agricultores que hayan solicitado tratar sus huertos con el insecticida prohibido, y con ello destruir su cosecha, recibirán 8 puntos.
Asimismo, si más del 60% de la fruta del campo está dañada, se otorgará 7 puntos (este es un criterio progresivo y variable en función de la afección). También puntúa si se es agricultor individual, si la solicitud la presenta una organización agraria o cooperativa, y si se pertenece a alguna figura de calidad o agricultura ecológica.
Además, cuando el importe propuesto para conceder sea inferior a 300 euros, la solicitud "no se tramitará por cuestión de eficacia y eficiencia administrativa, y se archivará el expediente con la comunicación previa a la persona solicitante", señala el documento.
Todo ello se gestiona en virtud de la normativa europea de ayudas de minimis, que establece que el total concedido a una persona beneficiaria "no podrá exceder de 20.000 euros brutos durante el ejercicio fiscal en curso y los dos ejercicios fiscales anteriores", recoge la orden.
El objetivo final es paliar el daño causado por una plaga llegada desde el hemisferio sur y que se ha convertido en una auténtica pesadilla para los citricultores de la Comunitat, agravada además por la dificultad de tratarla a raíz de la prohibición del metil clorpirifos por parte de la Unión Europea.
Ahora, y tras el periodo de exposición pública, Agricultura deberá resolver las alegaciones que se presenten (hay organizaciones agrarias que ya las han anunciado). Posteriormente, la conselleria deberá recibir los informes favorables de Abogacía de la Generalitat y de Intervención económica, para después publicar la convocatoria. En el departamento dirigido por Mireia Mollà esperan que antes del verano puedan salir las ayudas a concurso.