VALÈNCIA. El regreso de la actividad en la aerolínea valenciana Air Nostrum puede estar próximo. Será una reactivación muy limitada y condicionada por las nuevas medidas higiénico sanitarias impuestas por el Gobierno, que obligan a una ocupación máxima del 50% en los aviones, pero supondría un primer paso para salir de la parálisis en la que está ahora.
La ventana para volver a volar se ha abierto en Baleares. La empresa que preside Carlos Bertomeu está analizando si se presenta para operar un número limitado de vuelos comerciales interislas autorizados por el Ministerio de Transportes en su última orden sobre movilidad para los territorios de Baleares y Canarias dada su entrada en la fase uno del plan de desescalada trazado para las Comunidades Autónomas.
En el caso concreto de las Islas Baleares, uno de los mercados naturales de la aerolínea valenciana, el Gobierno fija una suerte de servicios mínimos desde este mismo lunes consistentes en dos vuelos diarios de ida y vuelta entre Palma de Mallorca e Ibiza y entre Palma y Menorca.
La orden de Transportes de este domingo obliga sin embargo a las aerolíneas interesadas a volar en cualquiera de los dos archipiélagos a aplicar medidas para prevenir contagios. Aunque deja a su criterio garantizarlo "mediante el procedimiento que consideren más adecuado", sí les impone volar con la mitad de los asientos vacíos. "A estos efectos, se considerará suficiente ofrecer al público solo el 50% de la capacidad total de cada aeronave para asegurar la debida separación entre pasajeros", concreta la orden.
Así pues, los responsables de Air Nostrum analizan la viabilidad de presentarse para operar esos servicios con las limitaciones que les impone la Dirección General de Aviación Civil. La orden del Gobierno no concreta el procedimiento para la adjudicación de las rutas entre las aerolíneas que puedan optar a las mismas.
Si da el paso, Air Nostrum debe informar al organismo de su programa de operaciones al menos con siete días de antelación al inicio de los vuelos.
Lo que de momento no tiene visos de regresar son las rutas entre las islas y el territorio peninsular en régimen de Obligaciones de Servicio Público (OSP), muchas de las cuales son operadas por la aerolínea valenciana. Estas rutas, subvencionadas por el Estado y que se adjudican por concurso, se mantienen por el momento suspendidas mientras se mantenga la declaración del estado de alarma por el coronavirus.