VALENCIA. Air Nostrum gana otro asalto en el combate que mantiene con Air Europa por el traslado de inmigrantes. El Tribunal Central de Recursos Contractuales, dependiente del Ministerio de Hacienda, acaba de darle la razón al desestimar el recurso de la firma del grupo Globalia contra la adjudicación a la UTE formada por la aerolínea valenciana, Evelop y Orbest -del grupo Barceló- de la devolución de inmigrantes irregulares a sus países de origen.
Se trata de la segunda vez que este organismo se pronuncia a favor del grupo en el que participa la empresa valenciana, lo que le permitirá comenzar a prestar el servicio de repatriación de inmigrantes irregulares por un plazo de 18 meses y un importe máximo de 11,8 millones de euros. Hasta ahora, el Ministerio del Interior siempre había contratado con la empresa de Juan José Hidalgo, a quien todavía le queda la opción de acudir a la justicia ordinaria para pelear el contrato por vía contencioso-administrativa.
Hasta ahora, la UTE formada por Air Europa y Swiftair ha estirado todos los recursos por vía administrativa para continuar prestando el servicio, prorrogado desde hace diez meses. La mesa de contratación del Ministerio constató el pasado 18 de febrero que la oferta de Air Nostrum, Evelop y Orbest era la económicamente mas ventajosa al plantear un precio un 20% por debajo del de su rival. El resultado en esta fase fue de 96 puntos frente a 70,9.
Con posterioridad, el 25 de febrero, se instó a las empresas que presentasen los requisitos de solvencia técnica. Dos meses más tarde, el 27 de abril, la mesa de contratación adjudicó el contrato a la UTE de Air Europa y Swiftair por la falta de una certificación de instrucción interna (ATO) de las dos empresas de Barceló a pesar de haberse impuesto en el apartado económico.
Fue entonces cuando el grupo en el que participa la empresa de Carlos Bertomeu recurrió ante el Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales al entender que la falta de la certificación a la que aludió la mesa no era motivo de exclusión. El TACRC, que ya le dio la razón entonces, acaba de fallar en el mismo sentido tras un nuevo recurso de Air Europa.
En el trasfondo de esta pelea, a la que Air Nostrum entra como parte de su plan por buscar nuevas fuentes de ingresos, está el pulso que Air Europa e Iberia mantienen en distintos ámbitos, como los vuelos a Latinoamérica o los viajes del Imserso a las islas.
El papel de Air Nostrum como operador de este servicio financiado con fondos de la agencia europea Frontex es el del traslado de inmigrantes con orden de expulsión dentro del territorio nacional. Las aerolíneas del grupo Barceló serán las encargadas de los vuelos de largo radio, a los países de origen, lo que le permite participar en mayor proporción de los ingresos, que se reparten por millas cubiertas y pasajeros transportados.