VALÈNCIA. El Ayuntamiento de Almussafes ha aprobado el inicio de los trámites para dejar de pertenecer a la Mancomunitat de la Ribera Baixa, de la que forman parte desde 1986. Entre los motivos para abandonar el ente comarcal, desde el equipo de gobierno aseguran que la asociación a este organismo "revierte en la prestación de prácticamente ningún servicio".
Por ello, consideran "que la inversión que cada año se realiza para el mantenimiento de la entidad, que actualmente asciende a 41.000 euros, pero ha llegado a ser de 60.000 euros en épocas anteriores, estará mucho mejor aprovechada si es la administración local la que la gestiona directamente", ha explicado el alcalde de Almussafes, Toni González.
En este sentido, y siguiendo la normativa de la institución, el primer paso para desvincularse de ella es, precisamente, el acuerdo del pleno municipal, que han logrado con los votos a favor de los nueve concejales del PSPV. Mientras que los dos regidores de Compromís y el del Partido Popular han votado en contra de la medida.
Entre los requisitos para poder solicitar esta desvinculación voluntaria se encuentran, además del acuerdo en el plenario, estar al corriente en el pago de las aportaciones y haber transcurrido el periodo mínimo de pertenencia establecido, dos condiciones que, desde la administración local aseguran que se cumplen.
"No creo que debamos estar manteniendo de esta forma una estructura de la que no obtenemos ningún beneficio", ha declarado el primer edil socialista. "Hemos estado apoyando y colaborando solidariamente a la comarca durante 35 años, pero desde el principio hemos aportado mucho más de lo que hemos recibido, ya que la prestación de servicios del ente comarcal en nuestro municipio ha sido prácticamente inexistente. Además, tampoco observamos que se generen sinergias entre las distintas poblaciones para mejorar los programas públicos", ha añadido.
Ante esta situación, desde el ayuntamiento apuestan "por gestionar directamente los fondos que hasta ahora hemos destinado a la mancomunitat". En este sentido, González ha anunciado que "la cantidad que deje de pagarse como cuota se destinará directamente a políticas de fomento del empleo y el bienestar social".