VALÈNCIA. Ana Rosa Quintana y su marido Juan Muñoz vuelven a estar de enhorabuena con su sicav Argomaniz Inversiones, dado que cerró el primer trimestre del año con un nuevo registro histórico. Concretamente el patrimonio a 31 de marzo pasado se situó en los 11,18 millones de euros, un 3,28% por encima de los 10,83 millones que contaba el último día de 2016.
Este vehículo de inversión, que está presidido precisamente por el esposo de la conocida presentadora de televisión, ha vuelto a recuperar la confianza en las acciones de Bankia. De hecho, y según la información recabada por este diario de la base de datos pública de la CNMV, Argomaniz Inversiones casi ha duplicado su apuesta por la entidad presidida por José Ignacio Goirigolzarri en los últimos tres trimestres. Así, al cierre del segundo del pasado año contaba con una inversión de 58.000 euros que a 31 de marzo del presente ejercicio ya era de 96.000 euros.
De este modo ha incrementado su confianza por las 'bankias' -como se les conoce en la jerga bursátil-, por cuanto al término del primer trimestre de 2016 mantenía una inversión de 96.000 euros. Bankia es la segunda exposición más elevada en renta variable española por detrás de Telefónica donde la sicav del matrimonio Muñoz-Quintana tiene inyectados 167.000 euros. Las otras participaciones en bolsa española están en Mapfre, IAG, Iberdrola, Banco Santander, BBVA, Inditex y CaixaBank.
Sin embargo, la cartera interior apenas representa el 5,65% del total, puesto que las posiciones en activos extranjeros siguen ascendiendo -tal y como ha venido avanzando este diario- y ya alcanzan el 91,76% repartidos en activos agresivos y conservadores. Entre los primeros destacan cerca de media docena de nombres de valores extranjeros en bolsa -tremendamente diversificados sectorialmente hablando- de la talla de Novartis, BMW, TotalFina, LVMH, Telecom Italia, ING, Amazon, Siemens, JM Morgan Bank, Walt Disney, Facebook y Airbus, por citar algunos.
Asimismo mantenía una treintena de participaciones en instituciones de inversión colectiva (IIC) del peso mundial de Pictet, BlackRock, Henderson, Axa, Fidelity, Goldman Sachs, Robeco y, entre otras, Lombard Odier, la entidad más antigua de Ginebra (Suiza), que precisamente es la gestora de Argomaniz Inversiones; mientras la sicav está depositada en BNP Paribas.
En posiciones más defensivas se dejaban ver en esta sociedad con 147 accionistas -pero uno solo controlando el 93,94% del patrimonio total- obligaciones de Avot Inversiones (del grupo burgalés Antolin); bonos noruegos; y bonos corporativos de Iberdrola y Telefónica en el plano doméstico, y de Brisa, Enel y Telecom Italia, entre otros, en lo que de puertas afuera se refiere.