Los resultados de Apple superaron las bajas expectativas y todo ello a pesar de una caída en los ingresos procedentes de ventas de iPhones cercanas al 10%. Lo más notorio es el crecimiento de los ingresos provenientes de los servicios, por encima de los 23.000 millones de dólares, lo cual nos parece interesante seguir vigilando porque nos da la sensación, que aunque sea de manera temporal y hasta que no triunfen con un nuevo 'gran' producto de cara al largo plazo, la compañía va a conseguir ir aguantando el tipo compensando la menor demanda de smartphones (todavía a día de hoy, la venta de iPhones suponen más de un 50% de los ingresos totales de la compañía) con unos mayores ingresos provenientes de la rama de servicios.
Pero uno de los puntos que más alaban los inversores es la gran recompra de acciones anunciada por un montante de 110.000 millones de dólares (o 27.500 millones por trimestre frente a los cerca de 20.000 millones de los últimos trimestres). Es alucinante la cantidad de dinero o caja que genera la compañía para recomprar parte de su capital, a modo de ejemplo durante los últimos seis meses, la caja gastada en recomprar acciones (43.344 millones de dólares) supone cerca del 75% de los beneficios generados por la compañía durante dicho periodo de tiempo, lo cual puede llegar a ser peligroso si la demanda futura va a la baja.
Independientemente de ello, el valor de marca, potencial de crecimiento y beneficios que sigue generando le permite hacer lo que ha venido haciendo durante los últimos años. La compañía empezó ayer a cotizar por encima de los 180 dólares por acción, máximos de los últimos dos meses, y mientras que no pierda ese nivel de referencia podría tener un comportamiento positivo durante las próximas semanas para ir a buscar los máximos del año en zonas de 195 dólares.
Juan José del Valle es analista de la agencia de valores Activotrade