La apuesta por la investigación en salud de vanguardia continuará tras los fondos europeos

VALÈNCIA (EFE). La apuesta del Gobierno de España por la innovación en investigación médica, diagnósticos y tratamientos punteros frente a lo grandes desafíos sanitarios, lo que viene a llamarse la “salud de vanguardia”, se mantendrá más allá de los fondos europeos.

Así lo ha subrayado hoy la ministra de Ciencia, Innovación y Universidades, Diana Morant en una rueda de prensa conjunta con la ministra de Sanidad, Mónica García, tras la cuarta reunión de las entidades que forman parte del proyecto estratégico para la recuperación y transformación económica (PERTE) para la Salud de Vanguardia.

El proyecto arrancó en 2021 con una inversión público privada de 1.469 millones de euros, que posteriormente se amplió hasta los 2.358 millones (300 privados y el resto públicos) hasta 2026, para financiar proyectos de ciencia, innovación y digitalización que actúen de palanca para afrontar los nuevos retos sanitarios, desde las enfermedades raras a la digitalización.

En respuesta a preguntas de los periodistas sobre la continuidad de la iniciativa más allá de 2026, Morant ha subrayado que el Gobierno garantiza que tanto este, como otros proyectos estratégicos de país que están en marcha, tendrán “continuidad y estabilidad” más allá de los fondos europeos.

Por su parte, la ministra de Sanidad ha subrayado que, gracias a los gobiernos progresistas, España ha podido “remontar” en los temas por los que apuesta el PERTE de salud de vanguardia tras haber sido “el valle de la muerte para los investigadores” durante los años de Gobiernos del PP.

“Hoy hemos podido comprobar que el PERTE muestra progresos importantes que en los próximos años se traducirán en avances en historias concretas de éxito”, que contribuirán a hacer del Sistema Nacional de Salud "un potente motor para avanzar hacia una mejor economía y sociedad", ha incidido García.

Entre los múltiples proyectos financiados por este PERTE están el desarrollo de técnicas avanzadas de imagen médica que permitan un diagnóstico más rápido del cáncer de próstata, a través de una colaboración entre el Instituto de Instrumentalización para Imagen Molecular del CSIC, el Hospital de la Fe de Valencia y la empresa General Electric.

O el avance en los tratamientos frente a la Ataxia de Friederich, una enfermedad rara hereditaria que se manifiesta en la infancia o adolescencia dañando la médula espinal y los nervios que controlan los movimientos de los músculos de los brazos y las piernas, a través de un proyecto de los Institutos de Investigación Trías y Pujol y Valdecilla, y la PYME Biointaxis.