VALÈNCIA. “Las compras están paralizadas desde 2022 por un problema administrativo que estamos intentando resolver”. Hace un año que la secretaria autonómica de Cultura, Pilar Tébar, firmaba estas palabras, preguntada por el freno a la colección de arte contemporáneo de la Generalitat. Lo hacía a preguntas de este diario durante la presentación de la exposición colectiva que presentaban las galerías de arte contemporáneo en el Centre del Carme en el marco de Abierto València. Un año después, ni se repetirá la exposición -a pesar de que estaba incluida en la programación del museo inicialmente- ni se ha retomado la colección.
Esta fotografía, sin embargo, tratará de suavizarse -al menos, ligeramente- con el aumento de la dotación de la Generalitat Valenciana en el premio de adquisición que desde hace años, como otras entidades públicas y privadas, concede en el marco de Abierto Valencia, el evento con el que abren el curso expositivo las galerías de arte asociadas en LaVac. En este caso, la Conselleria de Educación y Cultura ha puesto sobre la mesa un aumento del importe para la compra de obra en esta edición, que dará el pistoletazo de salida la semana que viene, pasando de 3.000 a 5.500 euros.
En su caso lo hace con el paraguas del premio a ‘Mejor exposición’, a través del que adquiere alguna de las obras presentadas por una de las galerías de arte aglutinadas en LaVac y que se suman al patrimonio artístico público. En 2024, Ana Esteve Llorens fue reconocida por Tocar un lugar en Set Espai d’Art, donde puso de relieve la materialidad textil de su obra como herramienta de investigación sobre la abstracción y lo escultórico desde una perspectiva conceptual físico-afectiva, mientras que un año antes, en 2023, Tania Blanco obtuvo el premio con Incautaciones. 36 sueños de una noche de verano, en Gabinete de Dibujos, un proyecto satírico-crítico que reformulaba una investigación a partir de imágenes.
Otros premiados
En 2018, Fermín Jiménez Landa (Galería Rosa Santos) recibió el premio por Una persona viva y dos muertas, un proyecto-instalación participativo que reflexionaba sobre los límites entre lo público y lo privado. En 2019 fue Álex Marco con Mulholland Drive en Luis Adelantado, una muestra pictórica expandida que, mediante cruces simbióticos entre pintura y audiovisual, ocupó las cuatro plantas de la galería a modo de quasiarqueología contemporánea. En 2020 se reconoció el proyecto coral Territorio y refugio, también en Luis Adelantado, en el que Rosana Antolí, Lucía C. Pino, José Luis Cremades, Nuria Fuster, David Lerones, Marta Negre, M Reme Silvestre, Anna Talens y Nelo Vinuesa exploraban la noción de refugio desde una idea del postpaisaje.
En 2021 el galardón fue para Santiago Talavera con El pasado habrá sido un planeta extraño en Gabinete de Dibujos, un proyecto que desplegaba instalaciones y dibujos en torno a topografías imaginarias de carácter distópico y con una marcada dimensión medioambiental. En 2022, Diego del Pozo presentó Oído Odio en la desaparecida sede valenciana de House of Chappaz (antes Espai Tactel), una exposición interdisciplinar que buscaba materializar el concepto de odio desde una perspectiva crítica y política.
