Arte y fotografía

La "infatigable" Mavi Escamilla llena de rojo y amarillo el Centre del Carme

Suscríbe al canal de whatsapp

Suscríbete al canal de Whatsapp

Siempre al día de las últimas noticias

Suscríbe nuestro newsletter

Suscríbete nuestro newsletter

Siempre al día de las últimas noticias

VALÈNCIA (EP). La "infatigable" artista valenciana Mavi Escamilla presenta en el Centre del Carme Cultura Contemporània (CCCC) de València la exposición 'Alteración del orden', que con sus características tonalidades amarilla y roja, que ya son un sello de la autora, recoge un amplio recorrido cronológico desde la pintura pero también con otros medios.

La muestra, según ha explicado en la presentación la propia creadora, recorre su carrera desde los finales de los años 80 con obras de "la arqueología del arte valenciano" hasta la actualidad con otras nuevas. A su juicio, resulta "evidente" la diferencia entre las distintas etapas, ya que en la primera predominan los colores "planos" y los símbolos, para pasar después a una "más figurativa" y volver de nuevo a una "abstracta".

Además, la autora ha reivindicado que da a los hombres "el derecho a ser objetos de deseo y hombres florero" y ha resaltado que, "aparte de la técnica", ha conseguido empastar todas las capas de pintura en los cuadros. "Creo que es mi mayor logro", ha valorado.

Según Escamilla, sus "problemas" son "pictóricos", puesto que le "gusta" el rojo y el amarillo, a los que trata de quitarles "siempre" el "hándicap" de que ambos "tienen que ser los colores de una bandera". "No me gusta que las cosas tengan significados 'random', como se dice ahora, los usé por ese motivo", ha confesado.

La exposición comienza con obras de sus inicios, en torno a finales de los 80 e inicios de los 90, donde destaca el uso de los colores cálidos, especialmente rojos y amarillos, un estilo "constante" al que la artista se ha mantenido "fiel" y que ha convertido en distintivo.

Así, en este diálogo entre "lo reconocible y lo simbólico" y la abstracción cromática "profundamente deslumbrante" del fondo, Escamilla exploraba ya las posibilidades que el medio pictórico tenía para sugerir "más que solamente presentar". Por ello, las primeras obras carecen de título e insisten en la "autorreferencialidad y la importancia del medio en sí mismo". De hecho, no será hasta ya entrados los 90 cuando incorpore nombres en las obras.

La muestra permite recorrer décadas de investigación formal y conceptual, pero también descubrir a la Escamilla "más viva, que continúa explorando medios, que altera hasta sus propios límites creativos para seguir profundizando en una obra crítica y profundamente comprometida".

"Francotiradora"

En esta línea, la especialista Rosa Ulpiano ha bautizado a Mavi Escamilla como "francotiradora" del museo por su crítica al arte clásico y las obras incompletas en las que trata de "transgredir el orden de las cosas" y "dar la vuelta", por ejemplo, a la mujer objeto, sustituyéndola por un hombre. "El homenaje a las mujeres es una constante en sus diferentes obras, siempre utiliza el humor", ha apuntado.

Con la muestra, la autora provoca en el espectador una serie de "legítimos interrogantes" cuyas respuestas constituyen el "elemento vertebrador" de su trabajo y la respuesta enfrenta al público consigo mismo, aunque "arrancándole una sonrisa, sin dramatismo". Al mismo tiempo, confunde al espectador por "escenarios irreales", advierte de las "contradicciones" y del "error que envuelve la atmósfera" en que se encuentra.

Además, 'Alteración del orden' es el título de la proyección que da nombre a la exposición. A partir de esta película de montada aleatoriamente fotograma a fotograma, la autora reorganiza las imágenes y crea con ello "una ficción nueva que incita a la alteración o disposición impuesta en la sociedad".

Ulpiano describe a Mavi, "más allá de encasillarla" en algún movimiento o en varios al mismo tiempo, como una artista que se apropia de las imágenes que la sociedad produce para "transgredirlas semánticamente y devolvérselas repletas de ironía y sarcasmo". También la define con tipos y diseños maridados con un poco de estética 'underground' y "una pizca" de 'punk', en definitiva con "una vida entera dedicada al arte no es cualquier cosa".

"Heredera de una época en que el No Future había dejado un bucle de negación absoluta, siempre se ha caracterizado, al margen de por ser una pintora en el sentido clásico de la palabra y una genia a los pinceles, por una obra de clara denuncia social, comprometida y desobediente", destaca.

"Vuelve a sus principios"

Por su parte, el director-gerente del Consorci de Museus de la Comunitat Valenciana, Nicolás Bugeda, ha resaltado que 'Alteración del orden' es una exposición "íntima" por la "pasión" con la que Escamilla ha desarrollado el "intenso" proceso de montaje. "A pesar del trabajo, hemos disfrutado mucho", ha revelado. Con ella, ha apuntado, la artista muestra toda su carrera, desde hace 40 años, y "vuelve a casa", donde estudió, "con todos sus recuerdos". "Es una revisión de su trayectoria que nos asombra", ha subrayado.

Bugeda también ha aprovechado para reivindicar que con esta muestra el Consorci de Museus "vuelve a sus principios" y apuesta por su "esencia", el arte valenciano, a la vez que por la recuperación de los artistas con "verdaderos homenajes" para plasmar las trayectorias pictóricas de los mismos. "Es un día feliz", ha celebrado.

Recibe toda la actualidad
Valencia Plaza

Recibe toda la actualidad de Valencia Plaza en tu correo