VALÈNCIA (EP). El número de empresas de automoción que han presentado Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) en la Comunitat Valenciana asciende a 52 compañías y afecta a 17.300 empleados, el 61% del total del empleo generado por las empresas del sector.
Estas son las cifras que ha conseguido recabar el clúster de la automoción de la Comunitat, AVIA, a través de una encuesta a sus asociados: 117 empresas, 100 de ellas industriales y el resto socios tecnológicos y colaboradores. Según recuerda la entidad en un comunicado, en 2018 las empresas industriales facturaron un global de 11.400 millones de euros y ofrecían trabajo a 28.300 personas.
El 67% de los ERTE se han presentado con el argumento de "fuerza mayor" y la gran mayoría de las empresas son aquellas con mayor dependencia de los OEM (Original Equipment Manufacturer), es decir, de los fabricantes de vehículos, y que reciben el nombre de Tier 1.
Por el contrario, las empresas proveedoras de segundo o tercer nivel -Tier 2 o Tier 3- se han visto menos afectadas por los ERTE ya que están más diversificadas en sectores, mercados y clientes. En el caso de las ingenierías asociadas a AVIA mantienen su carga de trabajo ya que, en la mayoría de los casos, trabajan por proyectos que siguen en proceso de ejecución y se pueden desarrollar en modo de 'teletrabajo'.
La cadena de valor del sector de automoción se compone de la cadena de valor principal, compuesta por el fabricante de coches denominados OEM --Fabricante de Equipamiento Original, en sus siglas en inglés--, y los proveedores, que se clasifican en función de su relación con el fabricante.
Así, los Tier 1 fabrican y secuencia módulos, piezas como asientos, suspensiones o salpicaderos, que envía fabricante para ensamblarlo en el coche.
Tras ellos se encuentran los Tier 2 que fabrican componentes como aireadores, o fundas para los asientos y que envían al proveedor Tier 1 para la confección de sus módulos.
Al final de esta cadena encontramos al proveedor de Nivel 3 o Tier 3 que suministra materias primas, o procesos de tratamientos para modificar propiedades de las piezas.
En esta cadena, también se integran quienes, sin producir, añaden alguna operación de valor añadido o secuenciación. El sector también está formado por ingenierías que desarrollan proyectos para cualquiera de los niveles de aprovisionamiento y empresas de logística que aseguran que cada pieza llega a su destino.
Para la presidenta de AVIA, Mónica Alegre, "estas cifras demuestran la importancia que tiene el sector del automóvil en la economía valenciana, la capacidad de generar empleo y riqueza que tenemos y como, una parada en nuestra actividad, afecta a numerosas familias".