VALÈNCIA. Renfe, Ouigo e Iryo, los tres operadores ferroviarios de alta velocidad en España, pedirán al Adif un precio fijo de la energía para los próximos seis meses, una solicitud con la que intentan evitar el fuerte impacto que los elevados costes de tracción eléctrica en su cuenta de resultados y asegurarse un horizonte de estabilidad en el precio hasta la negociación del nuevo contrato de suministro.
Con el sistema actual, la negociación con las compañías eléctricas y la compra de la energía para todo el sistema ferroviario corresponde al Adif, que posteriormente repercute el coste como servicio sobre los operadores que usan la infraestructura. El contrato actual, que vence el próximo marzo, fue negociado y firmado por el Adif en la modalidad de precio 100% variable sin contar con los operadores, de manera que las empresas están sometidas a los vaivenes de un mercado eléctrico desbocado.
Según explica a Valencia Plaza la directora general de Ouigo, Hélène Valenzuela, los tres operadores ferroviarios acordaron este miércoles con la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) pedir al Adif un precio fijo por la energía para los próximos seis meses.
Las tres empresas ferroviarias llevan tiempo estudiando posibles medidas para atenuar el impacto del precio energético, una partida que representa alrededor del 20% de sus costes y que en el mercado diario ha llegado a cotizar a niveles que multiplican el coste medio previsto en sus respectivos planes de negocio.
En marzo de 2022 hubo momentos en los que el precio llegó a alcanzar los 544 euros por MWh, con picos en los que tocó los 700 euros en algunas horas, muy por encima de la estimación de alrededor de 70 euros por MWh de los operadores.
Ouigo ha pedido al Gobierno que los operadores ferroviarios puedan comprar energía por su cuenta y no por medio de Adif como se hace ahora para conseguir la flexibilidad suficiente e intentar amortiguar unos precios eléctricos que, según las empresas, ponen en riesgo su actividad.
A raíz de esa petición para negociar a futuro su propio contrato eléctrico, en los próximos meses se les ofrecerá a los operadores la posibilidad de que cierren sus propias órdenes de precio y las trasladen a Adif para que pueda gestionarlas. Debido a que el marco de actuación actual establece lotes de volúmenes de energía, esta fórmula debe ser adoptada de común acuerdo por todos los operadores.
Con la nueva licitación, Adif negocia con las empresas que esas órdenes de cierre estén relacionadas con el consumo propio de cada operadora y no solo los lotes, garantizando una mayor autonomía a los operadores ferroviarios.
La CNMC ya afirmó en diciembre de 2021 que, dada la importancia de estos costes para los servicios ferroviarios, el gestor debería consultar con las empresas ferroviarias sobre las modalidades de contratación y la disponibilidad a pagar por coberturas de riesgo ante incrementos de los precios de la electricidad.