VALÈNCIA. Hay que atajar el declive del sector comercial y artesanal en la Comunitat Valenciana. Es la premisa fijada por la que la Conselleria de Economía al constatar que la tendencia negativa del sector -ha perdido un 17% del tejido empresarial desde que estallara la crisis económica de 2008 y un 6% durante la recuperación económica- se ha agravado con la llegada de la pandemia de coronavirus.
Es por ello que la Generalitat Valenciana, y en concreto el departamento que dirige Rafa Climent, busca algún tipo de salvavidas para un sector que engloba 48.000 empresas -la amplia mayoría, pymes-, que da empleo a 200.000 personas, y que además tiene un gran efecto arrastre sobre otros sectores económicos. El pretendido salvavidas se llama Plan Estratégico del Comercio Minorista y de la Artesanía de la Comunitat Valenciana 2021-2025 (PECA).
El programa se apoya en medidas que ya se han puesto en marcha o que están preparándose pero también en nuevas herramientas con el propósito de que el sector pueda afrontar sus retos de "la mejor manera posible" para "garantizar su presente y su futuro", en palabras de Climent.
Son más de 80 iniciativas entre las que se encuentran numerosos programas de ayudas relacionadas con el comercio, así como la creación de un 'hub' o centro de referencia "para avanzar en la transformación del comercio" o la puesta en marcha del proyecto 'Retail Future +' de digitalización comercial, que pretende sufragarse con los fondos de recuperación europeos Next Generation EU.
Este jueves, presentaron la receta para el comercio tanto el conseller como la secretaria autonómica de Economía Sostenible, Sectores Productivos, Comercio y Consumo, Rebeca Torró, la directora general de Comercio, Artesanía y Consumo, Rosa Ana Seguí, y el coordinador de la oficina PATECO, David Forés.
Si bien el principal reto actual, señalaron, es ayudar al comercio y a la artesanía a superar el bache del coronavirus "con la menor pérdida de empleo y empresas", el plan va mucho más allá con el propósito de modernización y digitalización del sector, de mejorar la competitividad de los equipamientos comerciales, adecuar la normativa -se trabaja en una Ley de Comercio Sostenible-, poner en marcha más recursos públicos y mejorar la colaboración con los agentes sociales.
En este sentido, se contemplan ayudas directas urgentes para la artesanía y las pymes vinculadas al mundo de las fiestas afectadas por la covid, así como el programa 'Reinici' de apoyo a subsectores comerciales detallistas, el 'Avalem Comerç' como nueva línea de reestructuración, y otros planes de inyección de liquidez como subvenciones al subsector del comercio cultural, a entidades locales para reactivar barrios comerciales o campañas de sensibilización sobre el comercio de proximidad.
Asimismo, se pretende hacer un censo de la venta no sedentaria y ambulante y un estudio de su situación, así como un mapa de vulnerabilidad y programas de modernización de este subsector comercial. Asimismo, se prevén llegar a cabo planes de formación de gestores y responsables de mercados municipales, y un registro público de grandes tenedores de locales comerciales, así como catálogos locales de establecimientos comerciales históricos y emblemáticos, entre otras medidas.
Además del 'hub' comercial y el proyecto de fondos europeos, la Conselleria de Economía plante estudios económicos y sociales del sector, así como encuestas de digitalización para detectar las necesidades tecnológicas de las empresas comerciales. Y a ello se sumarán otras líneas de trabajo como el fomento del asociacionismo, la creación de numerosos grupos de trabajo, la potenciación de la colaboración con agentes del ecosistema innovador y el desarrollo de la cátedra "Modelo comercial valenciano".
En cuanto a los objetivos existen 22 que, en su conjunto, "permitirán definir de forma más concreta" las actuaciones del PECA, según comentó Rosa Ana Seguí, si bien hay dos que son transversales: la digitalización y la transición ecológica. A su juicio, las 84 iniciativas que recoge el Plan "buscan aprovechar al máximo los recursos con los que ya cuenta la administración" y ha recordado que "parten de cosas ya realizadas que el plan pretende analizar para ver qué hacer".
El conseller cree que esto puede ser "una oportunidad", pero "solo con la colaboración del sector" y aseveró que el Plan "dará respuesta a nuevos retos" y que es "el inicio de un camino" en el que la Conselleria va a trabajar sin tener "visiones cortas" porque es un sector que "atiende al conjunto total de la sociedad".