VALÈNCIA (EP). La Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de València tiene previsto aprobar este viernes el PEARN, un novedoso Plan de Educación Ambiental de Residuos y Limpieza desarrollado por la Concejalía de Ecología Urbana, que recoge en un documento la planificación y la estrategia que va a regir las políticas educativas y comunicativas del consistorio en estas materias desde septiembre de este año hasta diciembre de 2023.
El objetivo de este plan es "mejorar la educación ambiental de la ciudadanía en el ámbito de la gestión de residuos y la limpieza de la ciudad y avanzar hacia las sostenibilidad a través de la participación de los vecinos y vecinas de València", según ha informado el consistorio en un comunicado.
"El plan ha sido elaborado de manera participativa y esperamos que implique a diferentes colectivos de la ciudad como los escolares, los colectivos falleros o las personas mayores, entre otros, que puedan acceder a la información de este plan y colaborar en mejorar la gestión de residuos de la ciudad", ha afirmado el vicealcalde y concejal de Ecología Urbana, Sergi Campillo, quien ha destacado el esfuerzo inversor que está haciendo el Ayuntamiento en este campo, "pasando de 55 millones de euros en 2015 a 80 en este ejercicio".
No obstante, ha dicho que se necesita de la colaboración ciudadana "para continuar mejorando en las tasas de recuperación de residuos y en la educación medioambiental". Este plan se ha elaborado a partir del estudio de los datos de recogida de residuos, la información obtenida del Barómetro municipal y los datos que ofreció un cuestionario de 26 preguntas realizado entre 49 entidades de la ciudad, sobre todo entidades vecinales u educativas, para conocer su opinión y sus necesidades educativas.
En una fase posterior, se realizará un estudio socioeconómico en cada uno de los barrios y distritos, que permitirá personalizar las diferentes acciones que se realicen para ejecutar el plan. El plan cuenta un presupuesto de 515.000 euros, que se suman a los 400.000 euros que invierte el EMTRE, que gestiona los residuos del área metropolitana, en la que participa València, "lo que supone una inversión total cercana al millón de euros para la educación ambiental en residuos y limpieza", señala el consistorio.
Campillo ha destacado que "es la primera vez en la historia en que se realiza un plan de este tipo", y ha recordado que "era una de las demandas de las entidades vecinales, que ha podido llevarse a cabo gracias a un proceso participativo". El plan parte de unos principios básicos o rectores como son la reducción, la reutilización y el reciclaje de los residuos; la participación, ya que necesita la colaboración de la ciudadanía para llevarse a cabo; la coherencia y la coordinación.
Sus acciones están estructuradas en torno a siete líneas de trabajo: estructura y funcionamiento; València ciudad formada y sensibilizada; la participación en la gestión; el trabajo en red; el Ayuntamiento como ejemplo; la comunicación y la creación de materiales.
Cada uno de los ejes recoge una serie de medidas entre las que destacan la creación de un coordinador del plan y formar un equipo de ocho educadores ambientales para ejecutar las diferentes acciones formativas.
También recoge campañas de consumo responsable, contra el desperdicio de alimentos o sobre la economía circular, así como acciones como la creación de un voluntariado ambiental y jornadas y cursos de educación ambiental dirigidas a los diferentes colectivos de la ciudad.