Adolfo Utor, presidente de Baleària. Foto: EVA MÁÑEZLA HABANA. El presidente de Baleària, Adolfo Utor, deberá seguir esperando para optar a cumplir uno de sus proyectos empresariales más ambiciosos: ser el primero en operar con sus ferrys entre Cuba y Estados Unidos. Así se desprende al menos de los encuentros mantenidos en las últimas horas con distintas autoridades cubanas, donde según admitía el propio empresario a Valencia Plaza, no se habían producido avances significativos. "En Baleària somos respetuosos y pacientes. Nuestro proyecto está en espera porque hay otros que son prioritarios para el gobierno de Cuba. Estaremos aquí cuando se nos requiera y sea necesario", comentó Utor a la salida del Foro Empresarial celebrado por la misión comercial valenciana en La Habana.
No obstante, el presidente de Baleària ha movido ficha para otros proyectos que le permitan ir introduciéndose en el mercado cubano. Así, admitió estar estudiando "algún tipo de tráfico interno orientado al turismo que pueda haber con Varadero, Isla Juventud, Cayo Largo...". "No descartamos a través de nuestra delegación en Miami estudiar una alternativa así con la que podamos empezar a hacer alguna actividad en Cuba", explicó, para recalcar que esto no iba a "restarle importancia e interés" al objetivo principal que es "conectar Cuba con otros territorios externos e internacionales".
Una iniciativa que, según el propio Utor, ya se había comentado en algunas de las citas del Foro Empresarial del jueves y que también había comenzado a trasladarse a diferentes representantes del Gobierno cubano en la jornada del viernes. De hecho, el presidente de Baleària participó en el encuentro con el ministro de Comercio Exterior e Inversión Extranjera, Rodrigo Malmierca, que encabezó el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, y en el que tomó parte además el presidente de Air Nostrum, Carlos Bertomeu, también con intereses en el país caribeño.
Una cita que, en el caso del objetivo final de establecer una línea marítima Cuba-EEUU no implicó, según admitieron fuentes conocedoras del encuentro, un avance relevante, pero que sí permitió poner sobre la mesa la disponibilidad de Baleària para otras opciones.
En este sentido, cabe recordar que la empresa marítima tiene, además de la nueva opción de las rutas internas, otras peticiones como una iniciativa de inversión para una terminal polivalente que pueda atender a cruceros y ferrys y también otra propuesta de comunicación interna dentro de la bahía a través de embarcaciones solares.
En cuanto al balance de la misión comercial valenciana en La Habana, Utor destacó que los últimos días habían servido a Baleària para tener contactos "con autoridades responsables de las inversiones y los nuevos proyectos en Cuba". "Nuestras peticiones están en una fase de estudio dentro de la complejidad que supone nuestra propuesta de abrir líneas internacionales en un país que durante muchos años ha estado sometido a un embargo por parte de EEUU y donde existen multitud de trabas en el ámbito jurídico y el ámbito operativo", explicó Utor a este diario.
En este sentido, el presidente de Baleària recordó que tienen presencia entre Bahamas y EEUU desde hace cinco años y recalcó el trabajo que viene haciendo la compañía alicantina en un plan de desarrollo dirigido a "establecer una red de transporte marítimo combinado -pasajero, vehículos y camiones- en el Caribe, donde esta modalidad no existe".
Sobre esto, Utor resaltó que su plan va "más allá" de entablar una comunicación entre Cuba y Florida, sino que la intención es establecer "una red de transporte marítimo combinado entre todas las islas del Caribe", algo para lo que Cuba es "muy importante" por su localización para conectar con múltiples destinos.
