VALÈNCIA. Bankia (BKIA) logró ayer abortar una nefasta racha de cinco sesiones cerrando en negativo en el parqué. Los títulos de la cotizada presidida por José Ignacio Goirigolzarri acabaron en los 3,813 euros, un 0,42% por encima del cambio anterior. De este modo, las 'bankias' -como se les conoce en la jerga bursátil- redujeron su pérdida anual hasta el 4,36%; mientras su capitalización se elevó suavemente hasta la frontera de los 11.763 millones de euros.
Sin embargo, BKIA se ha dejado en el parqué un 8,68% desde los 4,17 euros que marcara durante la sesión del pasado 27 de febrero. O lo que es lo mismo: en las últimas cinco jornadas. Casi nada. Y, como dato a tener muy en cuenta, el volumen de intermediación bursátil se ha venido incrementando en las últimas fechas. Sin ir más lejos ayer superó otra vez los 7,61 millones de títulos de su media diaria anual, según los datos de Infobolsa.
Pero todavía quedaban más factores negativos que están penalizando el comportamiento bursátil de la cotizada domiciliada en València, que por cierto volverá a celebrar aquí su próxima junta de accionistas fijada para el próximo 10 de abril. Apenas habían pasado unos minutos del cierre de ayer lunes, cuando la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) actualizaba las posiciones cortas del centenar de valores que nutren el Mercado Continuo.
En el caso de BKIA, los 'cortos' volvieron a elevarse para alcanzar el 3,33% a fecha 2 de marzo, frente al 3,19% de la penúltima comunicación del supervisor, lo que representa la cota más alta desde el 4,51% que contaba a 8 de diciembre pasado. Cierto es que la entidad solo mantiene en su accionariado a un bajista declarado (AQR Capital), que mantiene el 1,54% desde el 12 de enero de 2018.
Mientras tanto, Goirigolzarri afirmaba que la entidad "podría ser" un objetivo de compra para sus competidores domésticos, aunque se plantea el futuro como un banco independiente. "Somos una buena combinación para todo el mundo", señala el primer ejecutivo del banco en declaraciones al diario británico 'Financial Times' recogidas ayer por Europa Press.
No obstante, el pasado martes, durante la presentación del Plan Estratégico 2018-2020 de Bankia, Goirigolzarri rechazó planes de operaciones corporativas. "No tenemos en la mesa ni apareciendo por la mesa ningún tipo de operación corporativa", respondió cuestionado sobre la posibilidad de que Bankia fuera comprada por otro banco. "Tenemos el plan estratégico, tenemos una masa crítica y creo que Bankia puede seguir adelante de forma independiente", apuntó al diario británico el presidente de Bankia, que en el marco de su plan estratégico prevé alcanzar un beneficio de 1.300 millones de euros en 2020, un 62% más que en 2017, y repartir unos 2.500 millones de euros en dividendos durante el trienio del plan.
Por otra parte, en relación con la privatización de Bankia, Goirigolzarri señala que el Gobierno, propietario del 60,63% de la entidad, está en una "posición muy delicada. El mercado está, por supuesto, esperando que se venda una participación en Bankia, y el problema con eso es que tienes una volatilidad permanente (en el precio de la acción de Bankia)", añadió.