VALÈNCIA, (EP). Marcos Benavent, exgerente de la extinta Imelsa, será juzgado por un jurado popular de Valencia tras la denuncia que le interpuso la Diputación de Valencia por presuntas irregularidades en la empresa pública y gastos sin justificar. Junto a Benavent se sentará en el banquillo de los acusados José Enrique Montblanch, quien ocupó el cargo de director financiero de Imelsa.
Esta causa la instruía el Juzgado número 6 de Valencia de forma paralela a la investigación abierta en el Juzgado de Instrucción número 18, que se encarga del grueso de la presunta trama corrupta de Imelsa. La denuncia contra Benavent --quien se ha autodenominado 'yonki del dinero'-- y Montblanch la interpuso en 2015 la Diputación cuando todavía estaba al frente Alfonso Rus, investigado en otras piezas del caso Imelsa.
El juez instructor, tras diversas diligencias, ha acordado dictar un auto que transforma las diligencias previas en el procedimiento para que el juicio se celebre ante el tribunal del jurado. Ahora hay que concretar los delitos que se les imputa, según han informado fuentes conocedoras de este procedimiento.
En concreto, en enero de 2015 la Diputación de Valencia presentó dos denuncias contra Benavent por presuntos gastos no justificados durante el desempeño de sus funciones. La empresa pública detectó en el informe de la Dirección Financiera de 2014 una serie de anomalías en los vales de caja de los años 2010 a 2014, así como varias facturas de tres líneas de teléfono desde Ecuador por un importe de 14.000 euros entre el 26 de diciembre y el 13 de enero.
Asimismo, ante el requerimiento de documentación por parte de Hacienda correspondientes a los años 2010-2013, la empresa averiguó que en caja faltaba el soporte de salidas por un importe de 49.000 euros, dinero que se había sacado pero que no tenía un soporte que lo justificara.
Imelsa también denunció en el juzgado que Benavent, quien llegó a la entidad pública en 2007 y dejó su cargo en diciembre de 2014, se había llevado en diciembre todo tipo de documentación de la entidad de los años 2007 y 2008, además de un ordenador, y que había realizado así mismo una copia de archivos en soporte informático.
Por su parte, en este procedimiento también figura como investigado Montblanch, quien también tiene otras piezas pendientes del caso Imelsa como la relativa a irregularidades en contrataciones de la empresa pública y la del call center.