VALÈNCIA (EP). La propuesta Benimaclet, la integración Ciudad-Huerta, elegida a través de un concurso de ideas convocado en un proceso de participación ciudadana impulsado desde la Concejalía de Participación del Ayuntamiento de València para diseñar de manera conjunta y con la opinión vecinal este barrio de la ciudad, plantea ganar espacio en favor de quienes lo habitan y de la huerta. La iniciativa fue presentada este lunes en un acto público celebrado en el consistorio, que se comprometió a que la futura urbanización de esta zona recoja el sentir del vecindario.
En la presentación participaron el alcalde de València, Joan Ribó; el concejal de Desarrollo Urbano, Vicent Sarrià; el de Participación, Jordi Peris; el presidente de la Asociación de Vecinos de Benimaclet, Antonio Pérez; los rectores de la Universitat de València y de la Universitat Politècnica de València, Esteban Morcillo y Francisco Mora; el arquitecto Carles Dolç y el miembros del equipo técnico responsable de la propuesta.
La iniciativa defiende "no prolongar el viario de la ciudad" y, por tanto, "no prolongar la avenida Valladolid", y destinar en consecuencia la "gran superficie libre" que se generaría a "otra cosa" para ganar "espacio verde y también equipamientos", como "pistas deportivas y espacios para los vecinos" que sean "abiertos". Así lo plantearon desde el equipo encargado de la propuesta, que precisaron que se busca generar "un parque" distintos a los ya existentes o que se están creando para "mantener toda la infraestructura de la huerta" en esta zona de la capital valenciana. Consideran que esta idea es "una oportunidad" porque permitiría mantener "la cota de la huerta" en todo ese espacio y "salvaguardar todos los valores: el suelo, el patrimonio hidráulico de las acequias y la actividad agraria".
La propuesta descarta, pues, "abrir calles y subir todo a la cota de la ciudad y de la Ronda Norte", al tiempo que apuesta por mantener los huertos urbanos del barrio y pide "concentrar en los extremos" la edificabilidad planteada inicialmente en el PAI Benimaclet Este, en la actualidad parado, ya que "cabe la prevista en el planeamiento" inicial. Respecto a esta última plantea que vaya "de más a menos" conforme vaya aproximándose al parque y al entorno de huerta.
"No queremos repetir el modelo de Alfahuir, con edificios cerrados con piscina y zona privada. Queremos hacer un barrio. Es posible hacer cosas distintas, convivir ciudad y huerta, que haya acequias abiertas en la ciudad y alquerías de huerta en la ciudad. Ahora tenemos la oportunidad de hacerlo", indicaron desde el equipo responsable de la propuesta, a la vez que apuntaron que se calcula que la zona verde de Benimaclet podría "crecer y pasar de un 18 por ciento a un 40 por ciento —de 25.000 metros cuadrados a 80.000—.
Además, Benimaclet, la integración Ciudad-Huerta defiende "volver a poner en valor los caminos" de la zona como el de Vera y el de Fuentes. El Ayuntamiento de València y las dos universidades públicas de la ciudad mostrron su apoyo a la propuesta ciudadana para desarrollar urbanísticamente Benimaclet.
El alcalde de València, Joan Ribó, consideró que la propuesta recoge "reflexiones entusiastas y rigurosas" y destacó que su presentación representa "un acto de celebración, de reconocimiento y de reivindicación" de lo que pide y quiere ser Benimaclet. "Es una forma de presentar los planteamientos del barrio, de hacer urbanismo, una perspectiva nueva" desde el ámbito social, político y académico, dijo Ribó, que valoró la implicación de "todos los actores del barrio", según dijo, "profesionales, vecinos, universidades y ayuntamiento".
El primer edil señaló, asimismo, que esta presentación es "un acto de continuidad" y "no un punto final" para abordar la "transición" que se quiere llevar a cabo con el objetivo de lograr la unión de la ciudad y la huerta y "mejorar la calidad de vida" de esta zona. Joan Ribó añadió que se está trabajando para pasar "del desarrollismo a la participación ciudadana" y a la atención de "las especificidades de cada entorno", al tiempo que resaltó que la propuesta para Benimaclet supone también una "referencia ejemplarizante" para otros barrios. "Participar es más que alegar. Este es un ejemplo de una nueva forma de hacer política y de plantear urbanísticamente la ciudad", manifestó el responsable municipal, que agregó que por la "complejidad" de esta actuación habrá que consensuar algunos planteamientos.
Por su parte, el concejal de Desarrollo Urbano apuntó lo "particular" del "caso" del PAI de Benimaclet, que por determinadas "razones" ha sido "imposible desarrollar" y valoró que desde la "participación", con la propuesta presentada este lunes, se hace una "aportación importante" para acometer una "transición amable" de la ciudad y la huerta.
Sarrià, que expresó la "voluntad" de su departamento de ser "mediador" para lograr "el mayor consenso y sintonía en el desarrollo" del plan urbanístico de Benimaclet, reconoció "el esfuerzo de la propuesta, que ha recogido algunos planteamientos urbanísticos que condiciona la ordenación vigente". A su vez, resaltó la situación jurídica del PAI, pendiente de resolución judicial. "Nos encontramos ante uno de los programas pendientes en suelo urbanizable más antiguos de la ciudad. Durante más de dos décadas el anterior equipo de gobierno fue incapaz de gestionarlo. En estos momentos, el Ayuntamiento está pendiente de la resolución del conflicto judicial en relación a la titularidad del agente urbanizador", expuso.
Igualmente, dijo que su departamento, que agradece las iniciativas para el PAI planteadas a través de la participación, atenderá en la medida de lo posible sus aportaciones tras evaluar la viabilidad técnica y jurídica. Por su parte, Jordi Peris, destacó el carácter "pionero e innovador" de la iniciativa presentada "como estrategia participativa". El presidente de los vecinos defendió la supervivencia de "los queridos huertos urbanos" del barrio y recordó la vinculación de Benimaclet con la huerta. Francisco Mora y Esteban Morcillo, por su lado, destacaron la calidad de las propuestas presentadas, el compromiso que comportan y la necesidad de recuperar el patrimonio sociocultural de la ciudad.