De izquierda a derecha, Víctor Victor P. Amarnani, Rafael Aguado y Salvador Esteve. Foto: KIKE TABERNERVALÈNCIA. La tecnológica valenciana referente en ecommerce B2B BigBuy ha fichado al directivo Rafael Aguado como nuevo chief financial officer (CFO). Lo hace en el proceso de explorar qué oportunidades existen para la entrada de capital externo a la empresa, con el fin de potenciar el crecimiento de la compañía. Una posible operación para la que se estudia desde la entrada de family offices a private equity, venture capital o incluso un socio estratégico vinculado al sector.
Rafael Aguado, quien hasta el mes de junio era responsable de Operaciones en la consultora SpeedOut, liderada por Jaime Esteban, ha estado vinculado durante gran parte de su etapa laboral a la adquisición e inversión de compañías. Y es que, durante más de una década, ocupó el cargo de director de Inversiones en Grupo Zriser. Ahora, se pone al mando del área financiera de la tecnológica de dropshipping, que cuenta con sede en Moncada y próximamente se instalará en la Marina de València.
El directivo formó parte durante 11 años de la sociedad inversora de los hermanos Ana y Pablo Serratosa y participó en consejos de administración de compañías como Industrias Tayg, Solver Intelligent Analytics, Witrac, PlayFilm o Singularu. "Me incorporé hace algo más de dos semanas y después de valorar muchos proyectos y alternativas y sentarme varias veces con Víctor y Salva me gustó mucho el proyecto", explica. "Vi una capacidad de crecimiento brutal y, dentro del contexto en el que se encuentra la compañía ahora mismo, también creo que es un muy buen sitio donde capitalizar y volcar mi experiencia previa en operaciones corporativas y private equity en relación con inversores".
Aguado se ha incorporado en la tecnológica con dos misiones fundamentales. La primera, explorar y empujar la operación corporativa. La segunda, ordenar la estructura de la compañía para poder escalar de forma organizada. "Es una compañía que ha crecido tanto en tan poco tiempo que tiene muchos procedimientos que acabar de ordenar y de optimizar. Tenemos que poner en orden y estructurar las operaciones de forma más escalable y que nos permita llevar a Big Buy a un siguiente nivel sin que la estructura sufra", destaca.
BigBuy cerró 2021 con una facturación de 90 millones de euros. Mientras, espera llegar en 2022 a los 110 millones, un 22% más que el año anterior. La compañía está enfocada en la venta de productos de una amplia gama a minoristas con un ecommerce de forma que, los vendedores, no tienen que guardar el stock en su propio almacén ni mandar los pedidos, sino que es BigBuy la encargada de hacer llegar el producto al cliente final desde sus almacenes. Además, crean toda la tecnología alrededor de su servicio de dropshipping.
