Con el objetivo de garantizar su supervivencia, los Bioparc de Fuengirola y Valencia participan con éxito en el ambicioso programa internacional de reproducción, donde nacieron los primeros gorilas de Andalucía y Valencia. Y la Fundación Bioparc es la única institución española que colabora en el importante proyecto Ebo en Camerún para salvar un grupo aislado de estos majestuosos primates.
VALÈNCIA (VP). Los gorilas, junto con chimpancés, bonobos, orangutanes y humanos, forman el grupo de “grandes simios”. Especies con las que compartimos la gran parte de nuestro ADN y a las que hemos llevado, literalmente, al borde de la extinción. Este sábado 24 de septiembre se celebra el Día Mundial del gorila, una efeméride con la que se lanza un grito de auxilio hacia estos “primos hermanos” para concienciar a la sociedad. Se trata de una de las especies más conocidas, ha ilustrado mitos e inspirado películas que daban cuenta de su fuerza y lado más salvaje, pero también de su ternura y delicadeza. Hoy en día se encuentra en Peligro Crítico según la Lista Roja de la UICN (Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza), lo que ha motivado una transcendental movilización internacional para salvarlos.
El concepto Bioparc surge ante esta evidente necesidad de “pasar a la acción”. Y lo hace con la visión actual de intervenir en el doble ámbito de la conservación, in situ, en los hábitats de origen y ex situ, en los parques. De esta forma, los Bioparc de Valencia y Fuengirola, además de volcarse para aportar el máximo bienestar animal, participan en el Programa Europeo de Conservación de Especies Amenazadas (EEP) para tratar de garantizar su supervivencia y han consolidado relevantes grupos que han dado grandes alegrías. Justo a punto de cumplirse 10 años, nació en Bioparc Valencia el primer gorila de la Comunidad Valenciana, Ebo; al que acompañan Virunga (6 años), Pepe (4 años) y Félix (3 años), toda la prole del macho Mambie y las hembras Ali, Nalani y Fossey. También puede contemplarse el comportamiento de los “machos solteros”, con Jitu y Kabuli. Y Bioparc Fuengirola igualmente es el único parque de Andalucía en albergar una familia de gorilas, fruto de la cual nació el precioso Ekan, “el primer gorila andaluz”, que en breve cumplirá 2 años. En este tiempo se ha afianzado este grupo reproductor formado por el macho Echo y las hembras Buu, Wefa y Kim.
Con la misma fuerza es imprescindible trabajar para “salvar” a los gorilas en estado silvestre. Y con ese empeño la Fundación Bioparc es la única entidad española que colabora en el Ebo Forest Research Project. Esta reconocida iniciativa protege a un grupo aislado de gorilas en el valiosísimo bosque de Ebo, una selva virgen descubierta en 2002 y que en plena pandemia estuvo a punto de desaparecer convertida en una concesión maderera para después transformarla en un campo de cultivo de palma aceitera. Un auténtico reclutamiento internacional dirigió su denuncia al Gobierno de Camerún y consiguió una gran victoria al paralizar esta barbarie.
Pero todo este esfuerzo del mundo conservacionista no es suficiente sin el apoyo de la sociedad. Es necesario lograr un compromiso de cambio de conductas y que el desarrollo no sea a costa de la destrucción de las selvas. Para ello, los Bioparc de Fuengirola y Valencia y también Bioparc Acuario de Gijón, son grandes plataformas de concienciación, acercando la belleza de la naturaleza salvaje para emocionar y para provocar un sentimiento de amor y empatía hacia el medioambiente y los animales.
Con motivo de la conmemoración del Día Mundial del Gorila en los Bioparc se hará especial hincapié en dar a conocer la situación de esta maravillosa especie. Las principales amenazas son la pérdida de hábitat, pues sus territorios atesoran codiciadas materias como el coltán o la exótica madera y fértiles tierras para la agricultura intensiva. Los conflictos bélicos y la caza furtiva también siguen causando graves perjuicios. Por este motivo, es prioritario promover un desarrollo ético y respetuoso, así como un consumo responsable exigiendo productos que certifiquen su sostenibilidad. No podemos imaginar un planeta sin gorilas y su futuro está en nuestras manos.