Bonig saca pecho por los resultados conseguidos ante su apeado rival

VALÈNCIA. Tocaba valorar los resultados obtenidos apenas unas horas antes. Momentos después de que las urnas se cerraran en la primera votación de afiliados del PP en la Comunitat Valenciana para elegir a su presidenta regional, Isabel Bonig salía a valorar el desenlace de un novedoso proceso para el partido. Por primera vez, se celebraban primarias bajo la fórmula 'un militante, un voto'; método que la popular ya reivindicó previamente a la celebración del congreso nacional que se celebró el pasado mes de febrero y que refrendó a Mariano Rajoy como líder del partido a nivel estatal.

Pese a los defectos que presentaba el proceso -descuido en el control del censo y la poca ilusión que generaba en la militancia la obligación de estar al corriente de los pagos de las cuotas para poder participar en las votaciones- Bonig hacía una lectura positiva del "conjunto". No tenía otra opción.

El proceso de primarias había pinchado en participación, debido al músculo de militantes de la formación. A pesar de los casi 150.000 afiliados que tiene el PPCV, sólo 7.006 se inscribían para participar. Y de ellos, 6.824 acudían a votar -según las datos comunicarse, a falta de validarse por el Comité Organizador del Congreso-. Aún así, la única candidata a presidir el Partido Popular en la Comunitat Valenciana afirmaba que los resultados reflejaban que lo habían hecho "relativamente bien". "Siempre te van a echar en cara algo o que algo podría haber sido mejor. Pero esto supone un aval de una travesía por el desierto complicada del PP, a la oposición hecha en Les Corts y al nuevo equipo que combina experiencia y renovación", defendió.

Y es que, desde que tomara las riendas del partido en julio de 2015 para reconducir la coyuntura en la que se lo encontró -inmiscuido en numerosas causas judiciales-, Bonig ha intentado sacar a flote unas siglas que pasaron de las victorias apabullantes a verse sentados en la bancada de la oposición. Una andadura que, al principio, "algunos miraban con desconfianza preguntándose dónde iríamos". Pero que después, según apuntaba la líder popular, se ha demostrado que van en la dirección "correcta" para "recuperar la credibilidad perdida".

A pesar de que rehuyó opinar sobre su único contrincante en las primarias, el exdirigente de Nuevas Generaciones, José Luis Bayo, no pudo evitar dejarle algún que otro recado. "Nadie me ha regalado nada. Los hay que nos hemos ganado el puesto pelea tras pelea y lucha tras lucha, dando la cara en los que del cielo caían piedras, truenos, rayos. Y sabemos que hay que trabajar todos los días", zanjaba, dejando claro su compromiso al frente del partido mientras Bayo se alejaba de la formación.

Bayo, tras no conseguir sus reivindicaciones en el proceso, optó por retirar su candidatura. De hecho, el juzgado desestimó la suspensión cautelar de la votación, ya que no observó, como denunciaba el excandidato, que no se contaba con las "garantías mínimas". 

Bonig reconoce que deben actualizar los censos

Según la presidenta del PPCV, el número de militantes se encuentra actualmente alrededor de los 148.000. Sin embargo, la realidad es que siempre han existido dudas acerca de este tipo de cifras. Incluso desde la propia formación admiten la dificultad que existe para determinar, por ejemplo, si algún fallecido sigue dado de alta. "Si nadie viene a dar cuenta de ello, es muy complicado saberlo", señalaban este lunes. 

Ante esta situación, Bonig admitía la necesidad de actualizar los censos para que estos representen una "imagen fiel" del partido. De la misma manera que observaba que a pesar de que eran bajos datos de participación "lo importante era empezar" pese al "escaso tiempo"que han tenido desde la convocatoria hasta la celebración de las votaciones, un mes exacto. Se trata, en efecto, de la primera votación abierta del nuevo PP de la líder de la Vall d'Uixó.