El banco es uno de los más comprometidos con la sostenibilidad. En 2021, movilizó 31.375 millones de euros en financiación sostenible, tanto de préstamos como de bonos sostenibles, lo que supone un 150,8% más que el año anterior
VALÈNCIA. CaixaBank apoya, mediante su actividad, iniciativas y proyectos respetuosos con el medio ambiente, que contribuyan a prevenir y mitigar el cambio climático, a impulsar la transición hacia una economía baja en carbono y el desarrollo social. «Los retos medioambientales necesitan la implicación de todos y nadie está exento de contribuir a la transición climática: gobiernos, sectores de la economía y personas individuales. Todos tenemos un papel relevante, pero es el sector financiero, por su posición de intermediario de los flujos de capital, el que se encuentra en una posición privilegiada para actuar de catalizador en este cambio. Más que una obligación o un hecho dado por las circunstancias, es una oportunidad de seguir respondiendo a la demanda de la sociedad a la que prestamos nuestro servicio», asegura Severiano Solana, director de Estrategia y Seguimiento de Sostenibilidad de CaixaBank.
Debido a este compromiso con la sostenibilidad, en abril de 2021 se constituyó la Dirección de Sostenibilidad, de nueva creación tras la fusión con Bankia e integrada en el Comité de Dirección del banco, liderada por Eugenio Solla. También se creó el Comité de Sostenibilidad, responsable de aprobar la estrategia y las prácticas de sostenibilidad de CaixaBank, realizar su seguimiento y elevar para su aprobación por los órganos de gobierno las políticas de gestión de la sostenibilidad.
En este sentido, la entidad ha adquirido dos significativos compromisos internacionales. El primero es su adhesión, como miembro fundador, a Net Zero Banking Alliance (NZBA), iniciativa que promueve las cero emisiones netas en 2050. Mediante este nuevo acuerdo, los cuarenta y tres bancos firmantes de veintitrés países se comprometen a alcanzar las cero emisiones netas en 2050 en línea con el objetivo de limitar el incremento a 1,5 ºC y establecer, antes del fin de 2022, un objetivo de descarbonización de la cartera más contaminante para 2030.
CDP ha señalado a CaixaBank como empresa líder contra el cambio cimático
El segundo compromiso de CaixaBank es su adhesión a la Alianza para la Contabilidad del Carbono en la Industria Financiera (Partnership for Carbon Accounting Financials, PCAF, por sus siglas en inglés), que proporcionará un marco de medición de emisiones financiadas internacionalmente aceptado y supondrá la inclusión de CaixaBank en la lista Financial Institucions Taking Action, que identifica a las entidades que se han comprometido a medir y divulgar sus emisiones financiadas con el Estándar Global de PCAF.
Estos dos compromisos vienen a sumarse a los que la entidad ya había adquirido como su adhesión a los Principios de Ecuador, con el cumplimiento de los Acuerdos de París y su incorporación al Compromiso Colectivo para la Acción Climática de Naciones Unidas.
La actuación responsable de CaixaBank ha sido reconocida internacionalmente. El Dow Jones Sustainability Index la sitúa entre los mejores bancos mundiales en términos de responsabilidad corporativa. La organización internacional CDP, por su parte, la incluye como empresa líder contra el cambio climático. Además, Naciones Unidas ha otorgado a sus filiales VidaCaixa y CaixaBank Asset Management, la máxima calificación (A+) en inversión sostenible. «Este cambio, al que estamos asistiendo en el sector financiero europeo, se extiende a las inversiones de aseguradoras, fondos de inversión y fondos de pensiones. Todos necesitamos remar a la misma velocidad para alcanzar los objetivos medioambientales», afirma el director de Estrategia y Seguimiento de Sostenibilidad de CaixaBank.
Estas acciones vienen a reforzar la esencia de CaixaBank: un modelo de banca universal y sostenible, basado en la calidad, la cercanía y la especialización en productos y servicios adaptados para cada segmento. La misión de la entidad, que lanzará en los próximos meses su Plan de Sostenibilidad para el periodo 2022 a 2024, es contribuir al bienestar financiero de sus clientes y apoyar el progreso de las comunidades donde desarrolla su actividad. «Los retos medioambientales no vienen solos, no podemos olvidar aspectos sociales como la reducción de desigualdades, el acceso al empleo y la digitalización. En CaixaBank, la dimensión social ha estado muy presente desde nuestros orígenes. El compromiso social forma parte de nuestra historia, de nuestros valores y es una característica identitaria que nos hace entender la banca de una manera diferente: comprometida social y medioambientalmente con el entorno en el que operamos», destaca Severiano Solana.
De ahí aspectos como su fuerte compromiso con la diversidad de género, que ha hecho que la entidad se posicione como una de las empresas con más presencia de mujeres en dirección, con un porcentaje de mujeres en posiciones directivas del 41,3% a cierre del primer semestre de 2021, y también en el Consejo de Administración, compuesto en un 40% por mujeres. O por ejemplo su apuesta por mantener una amplia red de oficinas que favorece la cercanía al cliente y la inclusión financiera de toda la población, independientemente de su lugar de residencia. Y, gracias a la colaboración con la Fundación ‘‘la Caixa’’, 6.427 entidades sociales se beneficiaron de ayudas para llevar a cabo un total de 7.607 proyectos en 2020.
CaixaBank ha diseñado un modelo de banca universal socialmente responsable
Además, CaixaBank es la única entidad que ofrece microcréditos a personas con garantía personal y sin avales, a través de MicroBank, el banco social que facilita financiación a personas y proyectos que generan un impacto social favorable. MicroBank tiene la misión de promover la inclusión financiera, facilitando el acceso al crédito a los colectivos más vulnerables, así como fortalecer su compromiso con el desarrollo socioeconómico del territorio.
En 2021, MicroBank destinó 952 millones de euros a la financiación de proyectos que generan impacto social positivo. Este dato incluye los microcréditos otorgados a familias, los destinados a negocios y la financiación dirigida a sectores con impacto social, enfocada a proyectos de la economía social, la educación, el emprendimiento y la innovación.
CaixaBank ha cerrado el ejercicio 2021 en la sexta posición del ranking de financiación sostenible en Europa de Refinitiv y es el banco español mejor posicionado en esta clasificación. En 2021, CaixaBank ha movilizado 31.375 millones de euros en financiación sostenible. Esta cifra, procedente tanto de préstamos como de bonos sostenibles, supone un 150,8% más que el año anterior. En el apartado de préstamos sostenibles, CaixaBank ha cerrado 105 operaciones en 2021, por valor de 11.595 millones de euros. Esta cifra representa un 131% más que la conseguida en 2020 y supone un nuevo un récord para el banco en esta área de actividad.
«En los últimos cinco años, la transición del sector bancario hacia la inversión sostenible bajo criterios ESG está experimentando un avance sin precedentes. Es realmente único cómo se está impulsando esta transición y elaborando planes concretos que ponen la sostenibilidad en el centro de la estrategia y caminan hacia una transición energética adecuada y una descarbonización de la cartera. Los mercados financieros han recogido el sentimiento social y estamos canalizando recursos socialmente responsables para acompañar a las empresas en su implicación medioambiental. Las entidades bancarias tenemos por delante una misión muy relevante y una gran responsabilidad ya que debemos ser capaces de acompañar a nuestros clientes en esta transición», afirma Severiano Solana, director de Estrategia y Seguimiento de Sostenibilidad de CaixaBank.
A ello se une que CaixaBank ha sido elegido Líder en bonos sociales en Europa Occidental por la revista Global Finance en sus premios Sustainable Finance Awards 2021. Estos galardones, de nueva creación, destacan a las entidades líderes globales y regionales en iniciativas de financiación sostenible para mitigar los efectos negativos del cambio climático y ayudar a construir un futuro más sostenible para la humanidad.
CaixaBank fue el primer banco en emitir un bono social en apoyo de los ODS de la ONU en España y se ha posicionado como la entidad con mayor volumen de emisiones propias en euros de Bonos Verdes y Sociales: cuatro bonos verdes y otros cuatro bonos sociales, por un valor total de 7.000 millones de euros y 500 millones de libras. El informe de impacto medioambiental de los cuatro bonos verdes emitidos, publicado el pasado mes de julio, cifra el impacto de su financiación en una reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero de 1.459.000 toneladas CO2 equivalentes. Los 3.582 millones de euros captados entre los cuatro bonos, se han destinado a financiar proyectos que impulsan dos de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas: el número 7, energía asequible y no contaminante, y el número 9, innovación e infraestructuras.
CaixaBank tiene en cuenta aspectos sociales como la inclusión financiera, materializada en acciones como no abandonar poblaciones donde CaixaBank es la única entidad bancaria con presencia física. CaixaBank cuenta con una red de más de 4.600 oficinas de España. Esta dimensión otorga a la entidad una gran capilaridad geográfica: tiene presencia en alrededor de 2.200 municipios. En 360 municipios, CaixaBank se mantiene como la única entidad financiera, evitado así la exclusión financiera.
Una cuarta parte del total de oficinas se encuentran en municipios rurales. Muchas de las oficinas rurales de la entidad están altamente especializadas en el negocio agroalimentario, a través del modelo AgroBank, con gestores específicamente formados para atender a profesionales agrarios, dotados de tecnología móvil que les permite asesorar y formalizar contrataciones desde cualquier lugar, oficinas tematizadas y un alto compromiso con el desarrollo y difusión de las mejores prácticas del sector.
Complementariamente, CaixaBank cuenta con diecisiete oficinas móviles que prestan sus servicios en once provincias (Ávila, Burgos, Castellón, Ciudad Real, Granada, Guadalajara, La Rioja, Madrid, Segovia, Toledo y Valencia) y dan servicio a cerca de 250.000 personas residentes, según datos del INE, en los casi 430 municipios que visitan, la mayoría de ellos en riesgo de exclusión financiera. Estas oficinas móviles permiten a los usuarios, sean o no clientes de la entidad, realizar las operaciones bancarias más habituales, entre las que destacan retirar efectivo, realizar ingresos y pagar recibos e impuestos.
Otro aspecto con el que la entidad está comprometida históricamente es con el impulso de la educación financiera. Como parte del modelo de banca socialmente responsable, CaixaBank contribuye a la mejora constante de la cultura financiera de clientes, accionistas y, en general, de toda la sociedad. Para ello, la entidad cuenta con un hub de contenidos de cultura financiera, ubicado dentro de su web comercial, en el que se agrupan artículos, vídeos e infografías que acercan conceptos básicos de finanzas personales a todos los públicos. CaixaBank ofrece también charlas y talleres presenciales dirigidos a clientes, accionistas, jóvenes en la ESO y colectivos vulnerables, muchos de los cuales se desarrollan virtualmente en la actualidad, debido a la adaptación necesaria en el contexto de la pandemia.
A ello se suma que CaixaBank cuenta desde hace años con un plan consolidado, el Plan de Cultura Financiera, diseñado especialmente para la inclusión de jóvenes y colectivos vulnerables, y para cubrir las necesidades de toda la sociedad. Así han desarrollado distintos programas con vocación social como Mucho por hacer (un proyecto de divulgación sobre finanzas personales), Aula (programa de formación sobre economía y finanzas dirigido a los accionistas de CaixaBank) o Talleres de Voluntariado CaixaBank (talleres de finanzas básicas para adultos en riesgo de exclusión y para jóvenes en la ESO), entre otros.
También forma parte del Plan la acción social, llevada a cabo en colaboración con la Fundación ‘‘la Caixa’’ en los territorios donde está presente, así como el voluntariado corporativo. La colaboración entre ambas instituciones hace posible que miles de pequeñas y medianas entidades sociales solidarias puedan acceder a ayudas económicas para sacar adelante sus proyectos. En 2020, un total de 7.607 proyectos de 6.427 entidades sociales se beneficiaron de estas ayudas.
Además, Acción Social CaixaBank impulsa el voluntariado corporativo a través de su Programa de Voluntariado formado por una comunidad de 4.600 miembros, empleados en activo de la entidad y su grupo, de la Fundación ‘la Caixa’, de jubilados y prejubilados de ambas organizaciones, así como de amigos, familiares y clientes. Durante 2021, se han impulsado 5.700 iniciativas solidarias para ayudar a más de 170.000 personas, en ámbitos como la pobreza infantil, la exclusión social, la salud, las personas mayores o la educación financiera, entre otras actividades.